El golpe de Maria Teixidor
Presidenta de la Comisión de Control y Transparencia del Barça, responsable del fútbol femenino y secretaria de la Junta, su figura había cogido mucho vuelo en el Barça.
Fue Maria Teixidor (8-10-1975) quien llamó a Josep Maria Bartomeu para darle la noticia. El presidente podía esperar las dimisiones de Rousaud, Tombas, Calsamiglia, Font o Elias, pero la de Teixidor, al menos de puertas hacia fuera, resultó un trueno para el Barça. Había alcanzando gran relevancia en la directiva, tanto que durante un tiempo había sonado como posible relevo de Josep Maria Bartomeu en una candidatura continuista.
El ascenso de Maria Teixidor i Jufresa en el Barça estaba resultado fulgurante. Abogada, mediadora y emprendedora en el sector LegalTech (es la creadora de la primera app de detección en casos de bullying y resolución de conflictos para escuelas), era miembro de la directiva desde julio de 2015, cuando Josep Maria Bartomeu ganó las elecciones. Teixidor había revolucionado el universo femenino del Barça. Era responsable del primer equipo desde enero de 2018, colaboró activamente en la millonaria firma del contrato de patrocinio con Stanley, que presentó en Los Ángeles en la gira mixta que los equipos profesionales masculino y femenino realizaron por Estados Unidos en ese 2018. La sección de fútbol femenino se había convertido en la única profesional que genera beneficios, lo que hizo aumentar su prestigio como la espuma.
Un nuevo impulso para la mujer en el Barça. Eso significó Maria Teixidor. Desde enero de 2017, era presidenta del Grupo Edelmira Calvetó, creado por el club con el propósito de recuperar el legado de las mujeres en la historia del Barça, y fomentar el protagonismo de las socias y mujeres deportistas en el club. Además, representaba al Barça en el Grup de Treball Dona i Esport, que depende del Consell Municipal de l'Esport de l'Ajuntament de Barcelona. Su actividad en el Barça se mutiplicaba por momentos. Su nombramiento como secretaria de la Junta directiva en feberero de 2019 confirmaba su ascendencia en el club, donde tenía una actividad frenética. También estaba a cargo de las actividades relacionadas con los niños y los ancianos dentro del área social.
Y un detalle más, seguramente importante en esta historia. Desde septiembre de 2017, Maria Teixidor era presidenta de la Comisión de Control y Transparencia del Barça. Una comisión básica en la censura, por ejemplo, del escándalo de I3 Ventures, en la que el pago por la creación de cuentas que erosionaban la imagen de terceros fue fracturado para evitar el paso por las comisiones delegadas de control correspondientes.
Nadie duda de que Teixidor era un activo fundamental para la directiva de Bartomeu y una figura con recorrido. Su marcha deja al Barça sin referentes en el desarrollo del fútbol femenino y sin un rostro fresco que modernizaba la imagen del club. Ambiciosa, Maria Teixidor ha decidido marcharse. Quién sabe si para unirse a otra candidatura electoral con vistas a junio de 2021. Quién sabe si para presentarse e intentar ser la primera mujer presidenta de un club con más de 120 años de historia. Una imagen terriblemente poderosa que tal vez Bartomeu no haya pesado bien.