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SEVILLA

Los cedidos volverán a ser un gran problema para Monchi

De los once jugadores prestados a otros clubes, sólo Carlos Fernández se está revalorizando para ganarse así su regreso a Nervión.

Actualizado a
Corchia, con el Espanyol.
RODOLFO MOLINADIARIO AS

La planificación de la próxima temporada del Sevilla volverá a estar marcada, un verano más, por los jugadores que no entraron en los planes de Lopetegui hace casi un año y que ni mucho menos se han ganado su regreso a Nervión. De hecho, de los once jugadores que el Sevilla cedió a otros clubes entre el mercado estival y el invernal, en el que incluso algunos tuvieron que cambiar de club, sólo Carlos Fernández se ha revalorizado y ha demostrado tener sitio en la plantilla el próximo curso.

El rendimiento de Carlos Fernández en el Granada es la excepción de los cedidos del Sevilla. El canterano incluso ha llamado a las puertas de la Selección y en el improbable caso de que en Nervión no se contara con él, al menos podría dejar un jugoso traspaso en las arcas del club. Es el caso opuesto al de jugadores como Kjaer, Arana o Amadou, obligados a cambiar de destino en invierno por el escaso protagonismo que tenían en sus primeras cesiones. Arana preocupa menos puesto que su cesión al Atlético Mineiro, tras fracasar en el Atalanta, concluye en 2021. Kjaer también dejó el Atalanta en enero poniendo rumbo a un Milán que tiene una opción de compra sobre él. Amadou, primer fichaje de la temporada 18-19, fracasó en el Norwich y recaló en un Leganés, en el que sólo ha jugado un partido.

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El Leganés de hecho ha sido uno de los clubes que más problemas le ha quitado de encima al Sevilla este año, puesto que la cesión de Amadou fue la cuarta que llegó desde Nervión tras Juan Soriano, Roque Mesa y Bryan Gil. El portero no ha logrado desbancar de la titularidad a Cuéllar a pesar de las lesiones de su rival en el puesto, Roque Mesa no se ha acercado al nivel que hizo que el Sevilla apostara por él mientras que Bryan Gil está actuando de revulsivo. Por edad y proyección, la situación de este último no es un problema para el Sevilla.

Tampoco le han faltado minutos a Aleix Vidal en el Alavés ni a Gnagnon en el Rennes, aunque no han demostrado estar al nivel que se exige para pertenecer a una plantilla que lucha por la Liga de Campeones. Sergio Rico, pese a sus reiteradas suplencias, sí tiene opciones de quedarse en el PSG pero los franceses querrán rebajar la opción de compra que el Sevilla puso en su cesión. Y por último, Corchia sigue alargando en el Espanyol su calvario de lesiones de rodilla, que le ha impedido jugar desde finales del mes de noviembre.

El balance es claro: el Sevilla cedió a once jugadores, diez volverán en verano, salvo que se ejerza alguna de las opciones de compra que hay sobre ellos, y sólo uno ha aprovechado la temporada para llamar a la puerta del club propietario de sus derechos federativos. Monchi ya afirmó el pasado verano que en su planificación habían faltado cosas por no haber podido sacar rendimiento económico a los jugadores con los que no se contaba. El problema de hace un año apunta a convertirse en problemón en pocos meses.