Las bajas de Modric y Valverde complican el puzle a Zidane

A perro flaco todo son lesiones. Si a Zidane se le vaticinaba un problema sistémico a lo largo de la temporada con la falta de efectivos en el centro del campo del Real Madrid, los efectos han aparecido a las primeras de cambio. Con las bajas de Modric y Valverde el entrenador francés sólo cuenta con dos centrocampistas puros para afrontar el encuentro de este sábado (13:00, Movistar LaLiga) ante el Levante: Casemiro y Kroos. Eventualmente, también podría tirar de James.

La situación es aún más complicada teniendo en cuenta los usos y costumbres de Zidane. El técnico ha hecho gala, como una de sus señas de identidad, de reservar a los internacionales que regresan de un largo viaje tras un parón de selecciones y no forzar a los jugadores recién salidos de lesión.

Ejemplo paradigmático de lo primero es Casemiro. Esta ha sido la octava vez que el mediocentro acudía a una convocatoria de Brasil en medio de la Liga y teniendo a Zidane como entrenador. En las siete anteriores, Casemiro solo ha jugado dos veces el primer partido tras el virus FIFA y, en ambas la Canarinha venía de jugar en Europa. Fue tras el parón de noviembre de 2017, cuando el Madrid visitó al Atlético en el primer derbi madrileño en el Wanda Metropolitano (0-0) y disputó el partido el partido completo y esa misma temporada en marzo de 2018, en Las Palmas (0-3). Con Kovacic y Marcos Llorente en el banquillo, Zidane le dio la titularidad al brasileño y luego le sustituyó a él y a Modric en el minuto 61 con el encuentro ya resuelto para dar entrada a los dos primeros.

En las otras cinco, en una ocasión estaba sancionado, en dos no fue ni siquiera convocado y en otras dos vio el partido desde el banquillo. Así sucedió la campaña pasada tras el parón de marzo, cuando Casemiro fue suplente contra el Huesca en el Bernabéu (3-2), aunque los dos compromisos de Brasil en ese parón fueron en Europa. En resumen, de las tres ocasiones en que el brasileño ha estado disponible tras un viaje transoceánico, no ha jugado un solo minuto en ninguna. Zidane sentó otro precedente al respecto la temporada pasada: tras el último parón en marzo, contra el Huesca el francés dio la titularidad en la portería a su hijo Luca porque Courtois estaba lesionado y Keylor venía de jugar en Costa Rica.

En esa tesitura, a Zidane le queda Kroos como único centrocampista puro para esa posición. Pero al alemán no le gusta demasiado asumir las responsabilidades que suele desempeñar el 14 en el rol de pivote. "Yo no soy un Casemiro", llegó a sentenciar elocuentemente el teutón la temporada pasada.

Otra alternativa para cubrir la vacante dando descanso a Casemiro pasa por tirar de James acompañando a Kroos, aunque no sea la posición óptima para el perfil del colombiano, que, a su vez, arrastra el hándicap de salir de una lesión muscular. El otro condicionante que suele tener en cuenta Zidane...