Sin Neymar, Cavani, ni Mbappé, los parisinos se impusieron con goles de Di María de penalti y Choupo-Moting. El partido estuvo interrumpido por una pancarta homófoba.
La primera parte fue plácida para el PSG. El doble pivote Gueye-Verratti funcionó con balón y Aouchiche se sintió liberado en campo rival. Ante un rival como el Metz que defiende en marcas individuales, el técnico estiró a Bernat y Dagba, sus laterales, para que Sarabia y Di María centraran la posición y generaran una especie de 3 contra 1 ante Fofana. Esto permitió al PSG sumar muchas acciones por dentro y que los laterales del Metz sufrieran mucho al estar obligados a salir de su zona al centro del campo y dejar un latifundio a su espalda.
El primer gol no tardó en llegar. En una jugada ensayada en un córner, Fofana llegaba tarde a un balón dividido con Bernat y cometía penalti.Di María puso el 0-1 desde los 11 metros y el partido entró en un guión distinto, con un PSG más conservador con la pelota y con el Metz buscando envíos largos a Habib Diallo, una de las revelaciones de la pasada Ligue 2 al conseguir 26 goles.
Diallo puso en aprietos a Marquinhos y a Thiago Silva en varios duelos a la espalda de los centrales brasileños del PSG. El senegalés aprovechó la gran zancada que tiene y su gran disparo a media distancia para probar a Bulka. Fueron dos disparos desviados que permitieron al equipo de Hognon ganar metros y respirar ante el dominio parisino. No obstante, los dos disparos de Diallo fueron un espejismo, ya que el PSG volvió a destapar las carencias de los marcajes individuales del equipo granate.