El Oviedo de la 2019-20 se asentará en la cantera
Actualmente, los azules tienen 20 jugadores con contrato para la próxima temporada, aunque no todos tienen asegurada su continuidad.
El capítulo de Pamplona, con derrota 1-0, puso fin a las andanzas del Oviedo esta temporada en Segunda. El desenlace fue muy similar al de anteriores campañas, con los azules quedándose a las puertas del playoff de nuevo. Un mal que vuelve a dañar al oviedismo, ilusionado con disputar la fase decisiva por el ascenso. Cerrada la campaña con la derrota y el octavo puesto final, los focos se dirigen hacia la dirección deportiva, que lleva meses trabajando en la configuración de una plantilla que tratará el año que viene de afrontar con garantías la pelea por el ascenso a Primera.
Y en esos planes todo pasa por mantener un modelo similar al de la presente temporada, con una plantilla corta y la ayuda del Vetusta, que acaba de firmar la mejor temporada de su historia en Segunda B. La influencia será a partir de junio aún más directa, ya que varios futbolistas del filial darán el salto al primer plano. A jugadores que ya han tenido peso como Jimmy, Viti o Steven, se unen otros como Borja Sánchez y Lucas Ahijado, para formar una base con gente de la casa. También está el caso de Lolo, cedido durante la segunda vuelta al Extremadura, que debe regresar a la disciplina carbayona.
Con una base formada por gente de la casa más los futbolistas con contrato en vigor, los esfuerzos en esta ocasión se centrarán en posiciones puntuales. No se trata de una revolución, sino de acertar en puestos con gente que marque la diferencia en la categoría. Al frente del grupo se situará, salvo giro de acontecimientos inesperado, Sergio Egea, que tendrá la oportunidad de afrontar el reto desde cero. Su experiencia en el presente curso se ha limitado a los siete encuentros finales de Liga en los que no ha logrado que el Oviedo se colara finalmente entre los seis primeros de la tabla.