El balón parado es toda una bendición para el Girona
Ha logrado de falta, córner o penalti la mitad de sus tantos este curso
Al Girona se le puede considerar uno de los equipos más temibles a balón parado de Primera. El curso pasado, con Machín en el banquillo, demostró que la estrategia era vital para sumar puntos y esta campaña, con Eusebio, está manteniendo el ritmo. Tal es así, que la mitad de los tantos que ha logrado hasta la fecha el conjunto gerundense han llegado gracias a las acciones a balón parado.
Las faltas, penaltis y córners se han convertido en una bendición para el Girona y un suplicio para sus rivales. Y hoy ante el Atlético puede ser vital para llegar con vida al encuentro de vuelta en el Wanda Metropolitano. Hasta el momento, entre Liga y Copa del Rey, los de Eusebio han firmado 24 tantos y 12 han llegado gracias al balón parado. Los más recientes, los dos que lograron la pasada jornada ante el Levante (2-2). Stuani, pichichi rojiblanco con 11 goles y ausente hoy, es el acaparador en este aspecto porque de penalti ha logrado dos y otras dos más han sido tras una falta (Eibar) y un córner (Espanyol). Otros jugadores como Alcalá, Bernardo, Aleix García, Portu, Granell y Eric Montes también saben sacar provecho del balón parado.
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