Las malas noticias se le acumulan a Asier Garitano con la enfermería. El técnico de Bergara no gana para sustos. Si hace dos semanas era Diego Llorente y la pasada Merquelanz, ésta es el turno de Willian José. Igual que el irundarra canterano, el delantero brasileño se lesionó el viernes pasado en el derbi gipuzkoano de Ipurúa, y este martes se ha conocido el alcance de su lesión, que le dejará fuera de combate entre uno y dos meses, baja segura lógicamente para recibir al Barcelona el sábado 15 de septiembre.
Willian José sufre la peor de las lesiones posibles, después de retirarse con problemas en el aductor tras marcar el 0-1 en Ipurúa. De forma fortuita, al lanzar el penalti del gol, se rompió. Y no pudo seguir. Y el peor pronóstico posible se ha confirmado. “Presenta una tendinopatía en la inserción proximal del músculo aductor largo y una lesión de grado 2 en los músculos obturador externo y aductor largo de la cadera derecha”, señala el parte médico emitido por el club donostiarra, que añade: “Está siendo tratado mediante fisioterapia y realiza trabajo personalizado”. La lesión no necesita pasar por quirófano, pero su vuelta no será sencilla. De hecho, los galenos realistas no especifican el tiempo de recuperación, porque puede dóciles entre uno y dos meses si todo va bien, o más tiempo si no se recupera correctamente o hay alguna complicación. “La vuelta a sus actividades habituales estará condicionada por la evolución del cuadro clínico”.
Willian José se perderá, por tanto, el partido histórico contra el Barça en un Anoeta sin pistas de atletismo, y hasta noviembre Garitano no podrá contar con sus servicios, no pudiendo jugar incluso el primer derbi vasco de la temporada contra el Athletic que llega en octubre. El problema para el entrenador de Bergara es que Llorente también estará otros tres meses lesionado, por lo que pierde para un tramo decisivo de la temporada a dos jugadores que habían comenzado la liga dentro del once inicial, lo que supone un revés importante. De hecho, en las últimas temporadas, casualidad o no, los bajones de rendimiento de la Real ha coincidido con tiempo de lesiones del ariete brasileño.