¿Qué fue de Luis García?: uno de los héroes del 'Spanish' Liverpool
Llegó al equipo inglés en el curso 2004/05 y fue clave para ganar la Champions con cinco tantos. Salió del Barcelona y lució en el Atlético.
La llegada de Rafa Benítez al banquillo del Liverpool cambió la centenaria historia del club red. El técnico desembarcó en el verano de 2004 y con él comenzó la españolización del equipo: le acompañaron cinco jugadores nacionales (Luis García, Xabi Alonso, Núñez, Josemi y Morientes) con el objetivo de volver a reinar en Inglaterra y en Europa (tras 21 años sin ganar la Champions). Junto con Xabi Alonso, Luis García se convirtió en el español más emblemático para la afición de Anfield (años más tarde se consagrarían Reina y Torres) proclamándose como uno de los grandes llegadores de la Premier y de la Champions League, donde fue el jugador más determinante para lograr el título en 2005, año de la mítica final de Estambul en la que remontaron un 3-0 al Milán y ganaron en los penaltis. Antes, había salido de la Masía para lucir en el Atlético, a donde regresaría en el año 2007. Un fantástico atacante capaz de definir con las dos piernas indistintamente y cuya melena al viento y vendaje en los tobillos le dotaron de una imagen icónica en la primera década del 2000. Tras un final de carrera exótico, jugando en Grecia, México, India y Australia, ahora actúa como embajador de LaLiga y representante de Liverpool y Barcelona en los partidos de veteranos. Además, también es comentarista deportivo en programas de televisión.
Luis Javier García Sanz (Badalona, 24 de junio de 1978) comenzó a jugar al fútbol a los cinco años en el equipo de su barrio. Tras tres cursos en el Badalona y pasar por el San Gabriel, llegó al Fútbol Club Barcelona y comenzó a destacar como jugador desequilibrante y determinante en los últimos metros. Compartiendo plantilla en las categorías inferiores con Xavi, Puyol y Gabri, en el año 1997 sus guarismos en el segundo equipo blaugrana alcanzaron los 17 tantos pese a no jugar en punta, partiendo desde los costados o como segundo delantero. Debutó con el primer equipo el 18 de abril de 1998 en la Supercopa de España contra el Mallorca, donde tuvo 12 minutos en la ida (derrota por 2-1 pese a adelantarse en el marcador). En equipo balear se haría con el título venciendo también en la vuelta por 0-1. El jugador optó por salir cedido en busca de minutos y su destino fue el Valladolid, jugando seis partidos en Primera. La segunda mitad de la temporada la pasó en el Toledo, donde comenzó a mostrar su llegada con cuatro tantos. En la campaña 2000/01 el Barcelona envió a Luis García al Tenerife en una temporada en la que logró 16 goles claves para lograr el Ascenso a las órdenes de Rafa Benítez, que más tarde le reclamaría para el Liverpool. Su gran curso, compartiendo delantera con Mista, llamó la atención de múltiples equipos de Primera División. Dotado de velocidad, agilidad y una vivacidad en el área, que le permitía llegar a gol desde la segunda línea y adelantarse a las defensas rivales, el Valladolid volvió a hacerse con sus servicios un curso después. En su redebut con el equipo pucelano llegó su primer gol en la máxima categoría, en la jornada 9 en la derrota ante el Alavés (1-3). Acabaría con una decena de tantos en 29 partidos, uno de ellos contra el Barcelona (cayendo 1-2) y dos ante el Tenerife (1-5) demostrando su afinidad contra sus exequipos.
El Atlético de Madrid se haría con su fichaje en verano de 2002 por una cantidad cercana a los cuatro millones de euros, pero el Barcelona se guardaba una cláusula de recompra por algo más de 5,5 ‘kilos’. Luis García dejaría grandes sensaciones en el regreso del club a Primera División asumiendo la responsabilidad goleadora junto con Fernando Torres y Javi Moreno. Logró 9 goles en 30 partidos de Liga (solo superado por los 13 de Torres), una gran cifra teniendo en cuenta que la mayoría de veces partía desde la banda. Uno de los mejores partidos del aquel equipo dirigido por Luis Aragonés fue contra el Barcelona en el Vicente Calderón, en la goleada por 3-0 con los tantos de Fernando Torres, Emerson y Luis García, que definió a la perfección con la zurda ante Bonano con un disparo que tocaría el larguero antes de introducirse en la red. También brilló en la visita al Betis con un doblete, aunque el partido se cerró en empate (2-2).
Su gran curso provocó que el Barcelona ejerciese la opción de recompra y volviese a hacerse con sus derechos. En su primera y única temporada completa en el Barça, la 2003/04, anotó 7 goles en 38 partidos, tres de ellos en Liga y tres en UEFA. Al acabar el curso el Liverpool decidió pagar la cláusula de 9 millones y Luis García aceptó la propuesta de reunirse con Benítez. La Premier League vio como en el año 2004 la presencia de españoles crecía desde los cuatro participantes en 2003 (Reyes, Iván Campo, Mendieta y Javi Moreno), hasta los catorce (Cesc, Reyes, Luis García, Xabi Alonso, Núñez, Josemi, Morientes, Hierro, Iván Campo, Arteta, Almunia, Mendieta, De Pedro y Ricardo). En el Liverpool rápidamente se ganó el cariño de la afición con un estilo de juego directo muy apto para la Premier.
En su primer curso con los de Anfield logró 13 tantos, cinco de ellos en Champions, el máximo goleador del equipo en la competición con diferencia (Gerrard y Baros hicieron dos) y donde todos llegaron en las rondas eliminatorias. El Liverpool acabó levantando la orejona aunque nadie lo hubiese sospechado a los 45 minutos de la final, cuando el Milán se había colocado con un 3-0 a favor con los tantos de Maldini y Crespo por partida doble. El camino de los reds hasta llegar a Estambul había ido de menos a más. La fase de grupos la había superado en segunda plaza por detrás del Mónaco (12 puntos) y con los mismos 10 puntos que el Oympiacos tercero. El Deportivo fue cuarto con solo dos empates cosechados. En octavos el Liverpool eliminó al Bayer Leverkusen (global de 6-2) con dos tantos del español en la ida y uno en la vuelta, a la Juventus en cuartos (2-1) con el segundo gol de Luis García y Chelsea en semifinales (1-0) marcando el badalonés el único tanto de la eliminatoria aprovechando un balón suelto en el área en el duelo de vuelta en Anfield en lo que es el tanto más emblemático de su carrera. En los segundos 45 minutos de aquella final contra el Milán Gerrard marcaba de cabeza, Smicer con un disparo lejano y Xabi Alonso en el rebote de un penalti que él mismo había lanzado para igualar el partido, que se marchó a la prórroga. Sin goles en los 30 minutos extra, el partido se fue a los penaltis, donde Dudek se consagró como héroe. Paró los lanzamientos de Pirlo y Shevchenko después de que Serginho hubiese lanzado al palo el primero. Solo Tomasson y Kaká marcaron, por los goles de Hamman, Cissé y Smicer en los ingleses. Luis García disputó el partido completo, aunque no tuvo que lanzar desde los once metros.
Su gran año, que le convirtió en mito en Liverpool, le llevó a la Selección Absoluta. Su gran partido con el combinado nacional llegó el 12 de noviembre de 2005, en el Vicente Calderón en la ida de la repesca para el Mundial 2006 contra Eslovaquia. Luis García logró un hat-trick, que unido a los tantos de Torres y Morientes sentenciaron el último paso previo a la competición mundialista llevada a cabo en Alemania. Allí, el jugador del Liverpool participó en tres partidos, jugando 36 minutos en la derrota contra Francia en octavos que dejó fuera a la Selección dirigida por Luis Aragonés. Su etapa con España finalizó en 2007 con un balance de 21 partidos disputados y cinco goles anotados. En ese mismo año dejaba el Liverpool tras tres temporadas, 121 partidos y 30 goles. Su último curso acabó de forma trágica, ya que en enero tuvo que ser operado de una rotura en el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha que le impidió volver a jugar con los reds, que llegaron de nuevo a la final de Champions también contra el Milán pero en esta ocasión cayeron por 1-2 en Atenas con un doblete de Inzaghi.
Luis García haría el camino inverso a Fernando Torres, que cambiaba el Atlético por el Liverpool. El badalonés regresaba al equipo rojiblanco que iniciaba un proyecto ambicioso con los fichajes de Forlán, Simao, Raúl García o Reyes además del propio Luis García. La gran competencia en ataque provocó que de los 46 partidos en los que participó en la 2007/08 20 fuesen saliendo desde el banquillo. Marcó seis goles y el Atlético acabó en la cuarta plaza, pudiendo regresar a la Champions once años después. Antes, tuvo que superar en la fase previa al Schalke 04 alemán. El Atleti cayó por 1-0 en la ida, pero en la vuelta goleó por 4-0 en un duelo mágico vivido en el Calderón. Luis García hizo el tercer tanto que tranquilizaba a la afición colchonera. Ese sería el único gol del extremo en la temporada, donde solo fue titular 9 veces, lo que le llevó a salir con destino al Racing de Santander. Con los cántabros solo participó en 14 duelos sin conseguir ver puerta, donde sufrió varios los problemas físicos.
En 2010 comenzó su periplo en ligas extranjeras. Un año en Panathinaikos, otro en el Puebla mexicano (14 goles) y dos cursos en el Pumas también de México, cuando decidió dejar el fútbol y comenzar a comentar partidos para BeinSports. Pero poco después regresó a los terrenos de juego para volver a vestir de rojiblanco, en esta ocasión en el Atlético de Kolkata donde ganó la Superliga india. Tras retomar su papel como analista de fútbol televisivo, embajador del Liverpool, de LaLiga y de la UEFA y partícipe en partidos de Leyendas como red y como blaugrana, volvió al fútbol para jugar sus 10 últimos partidos en el Central Coast australiano, donde colgó las botas definitivamente en 2016. Nunca se ha desligado de un fútbol que desarrolló con pasión y donde conoció seis países diferentes dejando huella y convirtiéndose en uno de los primeros jugadores españoles en triunfar en la Premier y en convertirse en un ídolo para la afición del Liverpool, que todavía muestra su cariño y respeto por él partido tras partido.