La apuesta de Valdano

Hace apenas seis meses, Fabio Capello hizo llegar a las oficinas del Bernabéu una oferta que por entonces se antojaba irrenunciable: 5.500 millones de pesetas por Morientes. La baja forma mostrada por el ariete cacereño por esas fechas permitía pensar en aquella máxima con un perfil puramente mercantilista: ‘coge el dinero y corre’. Pero Jorge Valdano habló con Del Bosque, consultó con Florentino Pérez y decidió jugársela a favor de Morientes. "Hasta ahora no ha sido un futbolista normal porque no ha estado sano. Cuando tenga continuidad, demostrará que es el mejor 9 de España". Los meses pasaban, el Moro seguía ciego ante el gol y a Valdano le llovían palos de todos los colores.

Pero el argentino aguantó el tipo y mantuvo su apuesta a pesar de tener a la mayoría del personal en contra. A Morientes se le puso el cartel de intransferible y los servicios médicos le mimaron como si fuese la joya de la Corona. Guti no pudo ser tan resolutivo como en la última Liga y hasta Munitis tuvo que hacer milagros haciéndose pasar por un delantero centro de enjundia. El Moro curó sus males físicos, limpió su mente y recuperó el instinto depredador que llevan inyectado en sus botas todos los especialistas del gol. En tres semanas para el recuerdo, Morientes ha sacado la artillería y ya lleva siete goles como siete soles. El club puede ahorrarse una kilada. Valdano tenía sus razones...

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