Desde Baby Yoda no había tanta gente loca de manera colectiva por un pequeño ser. Estamos hablando del fenómeno que se ha llamado Baby Platypus, lo que es lo mismo en español: el bebé ornitorrinco.

Su imagen comenzó a circular en las redes sociales esta semana, deleitando a cualquiera y a todos los que vieron la pequeña y delicada criatura.

Solo hay un problema, que el pequeño ornitorrinco no existe. Es una creación de un artista. Como muchos comentaristas se apresuraron a señalar después de que la imagen se volvió viral, Baby Platypus es en realidad una pequeña escultura realizada por el artista de fantasía serbio Vladimir Matić-Kuriljov.

La descripción de la pieza en la publicación de ArtStation del artista dice claramente que es una escultura, es decir, no intentó colársela a nadie. Simplemente la imagen se viralizó fuera de contextos y se extendió el bulo.

Otras cuentas después han mostrado imágénes reales de crías de ornitorrincos. Los cuales, a pesar de que esta imagen sea falsa, son como todo el mundo sabe una de las criaturas más extraordinarias del mundo.

Los ornitorrincos son uno de los pocos mamíferos que ponen huevos (aunque no los únicos), a lo que se suma su particular anatomía que parece tener un pico de pato y una cola de castor. Por si esto fuera poco, tienen un espolón venenoso en su pata trasera, lo que también los ubica entre los pocos mamíferos venenosos que se encuentran en la Tierra.