Multa de 800 euros por colarse en el Coliseo de Roma
Dos jóvenes de 24 y 25 años, de nacionalidad estadounidense, entraron de noche al monumento con cervezas. Los transeúntes, desde fuera, dieron el aviso.
El Coliseo de Roma, uno de los grandes símbolos de la capital italiana y una de las maravillas del mundo moderno, tuvo este pasado lunes a dos turistas estadounidenses entre sus visitantes. El problema es que lo hicieron en horario prohibido, de madrugada, burlando todo control y con bebida alcohólica.
Los jóvenes, de 24 y 25 años, fueron sorprendidos por los carabinieri italianos a las 5:30 horas de la madrugada, tras disfrutar de unas cervezas a la espera del amanecer en el segundo anillo de uno de los lugares más icónicos de Roma. Fueron algunos transeúntes de la capital italiana quienes, tras ver desde fuera a los jóvenes, dieron el aviso al servicio de emergencias. Al poco llegó la patrulla para imponerles una multa de 800 euros a cada uno, por invasión de terreno y edificio.
Sin daños al coliseo
Tras admitir que habían conseguido eludir las barreras para acceder al antiguo Anfiteatro Flavio, se justificaron diciendo que no habían dañado nada, "solo queríamos estar solos en el Coliseo". Y, efectivamente, se comprobó que el monumento no había sufrido ningún acto de vandalismo. Alrededor del mismo, hay carteles avisando de la prohibición de marcar o dañar el Coliseo, bajo multas de hasta 2.000 euros o un año de cárcel si se viola la ley.
De acuerdo con CNN, los turistas habrían trepado por las barandillas para entrar, tras lo que accedieron al segundo nivel del edificio. Un portavoz de la policía explica al citado medio que fueron detenidos en la Via dei Fori Imperiali, una de las calles cercanas que lleva desde el Coliseo hasta la Plaza Venecia.
Lugar frecuente de vandalismo
El Coliseo, monumento al que cada año acuden millones de visitantes, es un escenario donde se forma frecuente se producen actos vandálicos. En el año 2014 un turista ruso fue sancionado con 20.000 euros con tallar la letra K en las paredes del templo romano. En 2019 un turista irlandés, de 32 años, fue sorprendido por personal del servicio del monumento tras grabar con un punzón sus iniciales en un pilar del primer nivel. Fue arrestado y multado con la acusación de haber dañado bienes te interés histórico y artístico.