El coliseo de Roma tendrá un suelo retráctil
El suelo será reversible y permitirá contemplar "la majestuosidad del Coliseo" desde donde luchaban los gladiadores, explica el ministro de Cultura.
El Coliseo de Roma, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, es uno de los lugares más emblemáticos de Italia y recibía alrededor de 25.000 visitantes diarios antes de la pandemia, con lo que su cuidado es una prioridad para el Gobierno. De ahí que vaya a renovarlo para aumentar su atractivo. El Ministerio de Cultura anunció este domingo que reconstruirá en 2023 la arena del Anfiteatro Flavio, la platea en la que combatían los gladiadores entre sí y contra animales salvajes, gracias a un proyecto marcado por la ecosostenibilidad.
“Después de años de estudio, se anunció el proyecto ganador. Será reversible, te permitirá visitar los subterráneos y ver la majestuosidad del Coliseo desde el centro, como lo fue durante siglos hasta finales del siglo XIX”, escribió en su cuenta de Twitter Dario Franceschini, ministro italiano de Cultura. Milán Ingeniería fue la empresa que ganó la licitación de 18,5 millones de euros frente a una decena de competidores.
El proyecto se desarrollará con “técnicas constructivas innovadoras, materiales adecuados y metodologías de análisis depuradas” que permitirán “garantizar la seguridad, funcionalidad y economía constructiva que, además de restaurar la imagen original del monumento y su funcionamiento como una compleja máquina escénica, permitirá también fortalecer la protección y conservación, en particular para proteger las estructuras subterráneas”, explica el Ministerio de Cultura en un comunicado.
El proyecto comenzó en 2014
El Anfiteatro Flavio, terminado bajo el mandato de Tito en el 80 d.C., tuvo durante el Imperio Romano un suelo de madera cubierto de arena colocado sobre los túneles y habitaciones donde los gladiadores y los animales aguardaban antes de salir a la arena. Sin embargo, este suelo fue retirado en el siglo XIX para excavar los niveles subterráneos, que están abiertos al público desde 2010, y hoy en día el centro todavía se encuentra al aire libre, salvo una pequeña parte.
El 2 de noviembre de 2014, el ministro Dario Franceschini relanzó la idea del arqueólogo Daniele Manacorda de devolver la arena al Coliseo. Desde 2015 se realizan numerosos estudios para elegir qué técnica usar y, finalmente, se abrió el concurso que ganó Milán Ingeniería, cuya plataforma retráctil tendrá dos objetivos. Por un lado, se pretenderá proteger las zonas subterráneas para que no estén tan expuestas a la meteorología. Por otro, este suelo permitirá a los visitantes vivir una experiencia inédita observando el Coliseo desde el punto donde se encontraban los gladiadores.
Asimismo, el Coliseo podrá acoger grandes espectáculos y eventos culturales de forma puntual. “Es un proyecto ambicioso que ayudará a la conservación y protección del monumento y mejorará su usabilidad”, aseguró Franceschini.
Ventilación e iluminación
Los diseñadores explican que la nueva arena se establecerá al nivel del plan Flavio. Las vigas se colocarán en las estructuras de la pared sin anclajes mecánicos y se realizará con una serie de paneles móviles de alta tecnología en fibra de carbono recubiertos con madera Accoya “obtenida con un proceso particular que aumenta la resistencia y durabilidad: una elección sostenible que evita la matanza de especies valiosas”. Estos paneles “gracias a la rotación y la traslación, garantizarán la flexibilidad y permitirán abrir las estructuras subterráneas a la iluminación natural”.
Por otra parte, 24 unidades de ventilación controlarán la humedad y temperatura subterráneas y, en 30 minutos, será posible garantizar el intercambio completo de aire. El plan protegerá las estructuras subyacentes de los agentes atmosféricos, reduciendo la carga de agua con un sistema de recolección y recuperación de agua fluvial que alimentará los baños.