Toca sacar de nuevo los paraguas o, si es posible, quedarse en casa lo que queda de semana porque llega a la Península otra borrasca, la quinta en este mes de enero, que se hará fuerte el fin de semana.  Una ciclogénesis explosiva de aparición inminente va a dar lugar a Justine, una borrasca considerada de alto impacto y que va a afectar de lleno a gran parte del país.

Este viernes y el fin de semana serán los peores días de Justine. Si durante el comienzo de la semana el país estaba experimentando una relajación en cuanto a las bajas temperaturas, con termómetros marcando hasta los 25 grados, la llegada de la nueva borrasca va cambiar totalmente la situación meteorológica del país, con fuertes rachas de viento, intensas lluvias o incluso nevadas.

El primer impacto de Justine

Durante el comienzo de la semana ya se han producido precipitaciones débiles o moderadas en regiones cantábricas y Pirineos. Sin embargo, las temperaturas han alcanzado cierta estabilidad tras ascender en los últimos días, lo que no llevaba a presagiar el descenso generalizado que se producirá con la llegada del fin de semana.

El frente ya ha comenzado a asomarse por el noroeste peninsular y desembocará en chubascos tormentosos en Galicia, aunque se espera que se exitenda por el litoral cantábrico. Justine traerá también fuertes oleajes y peligrosas rachas de viento principalmente en Galicia y Asturias.

La situación del fin de semana

Justine irá desplazándose el sábado poco a poco hacia el interior, con fuertes lluvias en gran parte de la Península y con mayor intensidad en el norte, acompañadas de tormentas intensas y granizo. Llegará a la nieve en los sistemas montañosos. Mientras tanto, en el área mediterránea predominarán los vientos fuertes o muy fuertes, aunque las temperaturas se mantendrán, al igual que en Canarias.

Las zonas más perjudicadas serán Galicia, Cantabria, Castilla y León y norte de Extremadura y, posiblemente, al resto de Extremadura, La Rioja y Navarra aunque de forma más débil. El mayor riesgo se dará en las costas gallegas y del litoral cantábrico, pues se producirán rachas de viento cercanas a los 120 kilómetros por hora. Durante la tarde y la noche, las olas podrán rozar los 10 metros en algunas boyas, y o alcanzar los 8 cerca de la línea de costa.

Ya el domingo el litoral mediterráneo se librará de las precipitaciones, que seguirán instaladas en una buena parte del país en forma de chubascos y viento. Sobre todo, fuertes rachas de ambos fenómenos en Galicia, Cantabria, Asturias, Navarra y Pirineos. Habrá lluvia débil y aislada en ciertos puntos de la mitad sur, y la estabilidad no llegará hasta este último día del mes de enero.