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CORONAVIRUS

Alertan de las consecuencias psicológicas que ocasionaría un nuevo confinamiento

Expertos de TopDoctors afirman que un segundo aislamiento tendría consecuencias mucho más dañinas para la salud mental de las personas.

Una camarera prepara la terraza de una Cervecería 100 Montaditos durante el tercer día de la entrada de Navarra en la fase 3 de la desescalada instaurada por el Gobierno a consecuencia del coronavirus. En Pamplona, Navarra (España), a 10 de junio de 2020.
Eduardo Sanz - Europa Press - ArchivoEuropa Press

Durante los meses que duró el estado de alarma en España a causa de la pandemia de la COVID-19 la población estuvo sometida a un estricto confinamiento que le impidió salir de casa. Como consecuencia, muchas personas sufrieron problemas psicológicos como depresión, ansiedad, conductas obsesivas o fobias. “Cuando se abrió la puerta y los españoles salieron de casa, nos empezaron a llegar consultas con estados de hipocondría y comportamientos compulsivos, aprehensiones, obsesiones y miedos. Pero, de forma general, lo que nos trasladan los pacientes es su estado de agotamiento físico y psicológico”, explica la psicóloga Marta de la Fuente Lago.

Ahora, debido a los brotes que están surgiendo, algunos sugieren que podría haber un segundo aislamiento. Este podría ser mucho más dañino para la salud mental de las personas, según advierten expertos de TopDoctors. “Esos efectos que sufrimos todos de forma progresiva durante el primer confinamiento surgirían más rápido y más fuertes. Nuestra resiliencia estaría afectada por la fatiga provocada por la primera desregularización emocional”, asegura la también psicólogoa María Rosario Gomis Ivorra.

Esto se debe a que la población se encuentra ahora mismo con problemas de desregularización emocional, ya que trata de regresar a su vida normal, por lo que otro aislamiento trastocaría sus planes y podría conllevar efectos psicológicos muy serios.

Diferentes secuelas del confinamiento

Gomis Ivorra revela que “en el 65% de los casos presentaban depresión, y ansiedad en el 27%”, refiriéndose a los pacientes que acudían a consulta tras el confinamiento. Unos trastornos de ansiedad que se veían “agudizados por el confinamiento, que cuestionan su estilo de vida y con motivación hacia el cambio", según los expertos.

También han presenciado la reactivación de traumas en adultos ocurridos durante la infancia o la adolescencia “debido a que la pandemia les hace experimentar una situación existencial extrema en la que predomina la sensación de indefensión, falta de control o imposibilidad de defenderse de una amenaza real” según la doctora Luisa Fernanda Yágüez Ariza, psicóloga clínica especialista en psicología infanto-juvenil y familiar.

Por otra parte, en España han muerto 28.605 personas por coronavirus desde que comenzó la pandemia, según los últimos datos de Sanidad, lo que ha provocado que sus familiares y allegados hayan tenido que hacer frente a los duelos, procesos ya de por sí muy difíciles, que se han agravado por la situación. Yágüez Ariza detalla que ahora se presentaban “diferentes peculiaridades, como culpa por no haber podido acompañar a su familiar en los últimos momentos de su vida y sensación de irrealidad, ante la imposibilidad de realizar el ritual de despedida habitual”.

Otros efectos psicológicos muy frecuentes del confinamiento han sido las reacciones fóbicas y paranoides, rupturas de pareja, problemas de comunicación familiar, padres y niños inmersos en divorcios conflictivos, y un marcado descontrol laboral y personal.

Consejos ante un hipotético nuevo confinamiento

Pese a que muchas personas han presentado problemas psicológicos, TopDoctors desvela que siete de cada diez pacientes agradecen la situación porque aseguran que ahora tienen más capacidad para gestionar otro confinamiento. No obstante, la doctora Gomis ha publicado una serie de consejos para llevar psicológicamente mejor las nuevas restricciones:

  1. Organizarse el día para tener claro lo que se va a hacer y, con ello, obtener una sensación de control.
  2. Hacer actividades o proyectos que hasta ahora no podíamos por falta de tiempo.
  3. Mantener el contacto con nuestros seres queridos y descubrir nuevas formas de dar y recibir afecto. En esta línea, añade la importancia de “expresar emoción con la mirada, ser conscientes del tono de voz, y poner en práctica gestos que indiquen a los demás nuestra empatía, solidaridad y cercanía”.
  4. Tratar de encontrar tiempo para hacer ejercicio físico, aunque sea dentro de casa, ya que es muy beneficioso para la salud física y mental.
  5. Intentar no obsesionarse con mantenerse informado durante todo el día.
  6. En caso de tener hijos, hay que procurar transmitirles “una sensación de tranquilidad y control, contando siempre la verdad si preguntan”.
  7. No tener reparo en pedir y aceptar ayuda en caso de necesitarla. “Progresivamente irán surgiendo nuevos síntomas psicológicos, y con ello la necesidad de recibir apoyo y contención emocional, especialmente de los familiares y amigos, pero también será necesaria la atención psicológica, en aquellos casos en los que la ansiedad y la irritación irrumpan y produzcan un desbordamiento imposible de contener”, establece Gomis.