Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

CORONAVIRUS

España registra los mismos casos de coronavirus que en la última fase del confinamiento

En las últimas 24 horas el Ministerio de Sanidad notificó 1.1153 nuevos positivos, una cifra que no se alcanzaba desde el 1 de mayo, cuando se detectaron 1.175.

Varias personas caminan por una calle del centro de Valencia después de que el Ministerio de Sanidad autorizara a que la totalidad de la Comunidad Valenciana pasase en su conjunto a la fase 1 de la desescalada. Las terrazas de los restaurantes y bares de
Rober Solsona - Europa Press - ArchivoEuropa Press

El confinamiento al que nos sometimos durante más de tres meses logró reducir los contagios de coronavirus que se estaban produciendo en España. Sin embargo, la vuelta a la normalidad en pleno verano ha provocado que los casos volvieran a aumentar paulatinamente hasta alcanzar las cifras registradas en el aislamiento. Este miércoles, el Ministerio de Sanidad notificó 1.153 contagios en las últimas 24 horas. No se registraba una cifra igual desde el 1 de mayo (1.175), cuando los españoles estábamos cerca de poder dar los primeros paseos.

Estas cifras se deben a los numerosos rebrotes que han surgido por todo el país y que actualmente rozan los 400. Especialmente afectadas por ello están siendo las comunidades de Aragón (424), Cataluña (211) y Madrid (199), que concentran el 72% de los casos totales detectados el último día. Sin embargo, la incidencia en función de la población a una escala de tiempo más amplia indica que Navarra, con 73 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días, ha superado a Cataluña (66,1), mientras que País Vasco (38,5) está por delante de Madrid (21,3), si bien la capital está sufriendo un gran crecimiento de casos en los últimos días.

Los brotes se reparten de manera desigual por todo el territorio nacional, pero cada vez están más extendidos y el análisis no es positivo. “Estamos claramente en una segunda ola, lo que hay que ver es si será mayor o menor”, ha afirmado Rafael M. Ortí Lucas, presidente de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (Sempsph) en El País.

Mejor rastreabilidad

Las cifras de contagios son parecidas. Pero hay algo que ha cambiado notablemente con respecto a principios de mayo: la capacidad de diagnóstico es muy superior. Entonces, con el colapso del sistema sanitario y la falta de recursos, se hacían menos de la mitad de las pruebas que se realizan ahora a las personas con síntomas, siendo el porcentaje de positividad entre un 5% y un 10%. Sin embargo, ahora realizan pruebas al 95% de las personas sintomáticas, según el Ministerio de Sanidad, y los resultados positivos son el 1,2%, lo que significa que “la transmisión se ha reducido”, explicó el lunes Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias.

Afecta más a los jóvenes

Otro aspecto que ha cambiado con respecto a la situación de mayo es la edad de los contagiados. Ahora afecta a personas más jóvenes. La media de edad de los diagnosticados durante el confinamiento era de 60 años, mientras ahora ha bajado a 40 en hombres y 43 en mujeres. Los expertos alegan que esto puede darse porque, por una parte, las personas mayores se encuentran más protegidas y, por otra, porque se hacen más pruebas, como consecuencia de los rastreos y salen a la luz casos asintomáticos que antes se ignoraban.

Esto tiene una gran parte positiva. La cifra de hospitalizaciones y muertes ha disminuido considerablemente. El 1 de mayo hubo 732 ingresos, de los cuales 84 enfermos necesitaron cuidados intensivos, y 281 muertes. En cambio, este miércoles 29 de julio, en la semana previa registraron 427, hospitalizaciones, 21 personas en cuidados intensivos y 9 fallecimientos, lo que hace una media diaria de 61 ingresos, tres en cuidados intensivos y poco más de un deceso.

Pero estos datos son secundarios. Primero hay que fijarse en los números de casos y tratar de frenarlos. Porque, como avisó hace unos días Margarita del Val, viróloga del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en la Cadena Ser, las personas asintomáticas, que son más de la mitad, “nos va a dar un susto en cualquier momento porque toda esta gente que lo transmite sin enterarse va a llegar a la población mayor y vamos a tener otra vez de golpe muchos casos graves”. De hecho, en los últimos días las hospitalizaciones ya presentan cierta tendencia al alta.

Principales causas de los brotes

El ocio nocturno y retomar el contacto social han sido los grandes detonantes de los brotes que han aparecido en España. La mayoría de focos están relacionados con estos ámbitos. También el laboral aporta muchos contagios.

A las autoridades preocupa especialmente el ocio nocturno, ya que la mayoría de jóvenes que se contagian es debido a la asistencia a bares de copas o discotecas. Estos establecimientos ya tenían restricciones en cuanto al aforo o al uso de la pista de baile. Pero, aun así, siguen sin ser del todo seguros. Muchas veces no respetan estas medidas o no controlan que los clientes cumplan con la distancia de seguridad o el uso de la mascarilla. Como consecuencia, los gobiernos regionales han centrado gran parte de sus esfuerzos en imponer medidas más estrictas en este sector. 

Resultados progresivos

La preocupante situación que vuelve a vivir España a causa de los brotes y el repunte de casos ha provocado que todas las Comunidades Autónomas hayan implantado medidas de restricción que afectan a poblaciones enteras para evitar la transmisión comunitaria que se está produciendo. Algunas localidades han regresado a las diferentes fases de la desescalada, mientras que en otras áreas se ha invitado a la población a autoconfinarse, aunque sin obligar a nada. La única obligatoriedad que se ha instaurado prácticamente en todo el país es el uso de la mascarilla, aunque se pueda mantener la distancia de seguridad. Unas medidas que, según opina Martí Lucas, tardarán un poco en dar resultados visibles: “Los datos siempre van por detrás, habrá que esperar 10 o 14 días”.