Mongolia decreta la cuarentena tras detectar peste bubónica
La medida se aplica en un distrito del país asiático después de que un hombre que se había alimentado con carne de marmota haya sido ingresado con síntomas de la enfermedad
Mientras todo el planeta se encuentra combatiendo a la pandemia del coronavirus, en Mongolia se han activado las alertas por peste bubónica. Las autoridades del distrito de Uliastai, en la provincia de Zavkhán, al oeste del país, han declarado una cuarentena indefinida tras haber detectado un caso sospechoso de la enfermedad en este territorio.
De esta forma, desde el 25 de julio está prohibido entrar y salir de Uliastai, donde asimismo se ha solicitado a los ciudadanos que eviten reunirse en grupos numerosos después de que un habitante de esta localidad haya sido ingresado en un centro médico con síntomas propios de la peste negra o bubónica. Así, el hombre presentaba dolor muscular y de cabeza, además de fiebre alta.
Se alimentó de carne de marmota
Según ha trascendido, este individuo, de 39 años de edad, y su familia comieron carne de marmota días antes de que aparecieron los efectos de la enfermedad. Dicho animal es portador de una bacteria, denominada yersinia pestis, que provoca esta afección.
Por ello, y como sucede en los casos detectados de coronavirus, todos los contactos sociales de esta persona deberán cumplir aislamiento en sus domicilios con el objetivo de impedir que la enfermedad se propague por toda la provincia. Además, las autoridades han pedido a los ciudadanos que no coman carne de marmota para evitar nuevos posibles casos.
Más casos
A mediados de este mes de julio se produjo la muerte por peste bubónica de un adolescente de 15 años que residía en otro territorio de Mongolia, concretamente en el distrito de Tugrug, en la provincia de Gobi-Altai, al oeste del país. Al igual que el sujeto de Uliastai, el joven se había alimentado de carne de marmota, animal que ingirió después de cazarlo, según desveló Dorj Narangerel, portavoz del Ministerio de Salud de Mongolia.
Además, se han detectado recientemente otros casos en Mongolia, país que registró 692 casos de este tipo de peste desde 1928 hasta 2018. De ellos, 513 murieron debido a una enfermedad que también puede transmitirse a través de las picaduras de pulgas o de persona a persona. Para su tratamiento existen antibióticos que resultan eficaces si se administran a tiempo.