Coronavirus

"Mi preocupación sobre Lleida la puntúo en 10 sobre 10, la de España la valoro en 8"

La doctora Legido-Quigley, experta en salud, afirma que la situación originada en la comarca de Segrià era "previsible": "Es una crisis social y sanitaria".

"Mi preocupación sobre Lleida la puntúo en 10 sobre 10, la de España la valoro en 8"

El control de los brotes en España centra los esfuerzos de todas las autoridades. Los hay en todo el país, salvo en La Rioja y en Asturias y el de la comarca del Segrià, en Lleida, es el más grave, con más de 800 personas contagiadas. A este respecto, la doctora Helena Legido-Quigley, experta en sistema de salud y profesora de la Universidad de Singapur y de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, ha ofrecido su punto de vista en La Sexta sobre la situación de los rebrotes en nuestro país.

De cero a diez, su nivel de preocupación con el foco de Lleida está al máximo, mientras que en el conjunto de España se rebaja un poco: “A nivel español, un 8. Si nos centramos en Lleida, un diez. Creo que lo que está pasando es una crisis sanitaria y social”. Legido-Quigley se refiere a las condiciones en las que viven los temporeros e inmigrantes, algunos de ellos incluso sin techo. Por eso, ha calificado la situación de “previsible”.

La docente ha comparado la situación con Singapur, su lugar de residencia, donde hay unos 300.000 inmigrantes. “La situación es incluso peor, que ya es decir, que en Singapur”, ha comentado. En ese sentido, ha pedido que se hagan “test agresivos” a estas personas, es decir, “PCR, test serológicos y más de una vez a cada uno”. Y también ha insistido en que es importante darles “un acomodo adecuado” que mejore sus condiciones de vida. “Hay que integrarlos en la sociedad y no criminalizarles”, ha subrayado.

Pide la contratación de 2.000 sanitarios

A pesar de todo, la profesora cree que las autonomías están haciendo un gran “esfuerzo” para controlar la pandemia y detectar de forma precoz los casos, pero ha solicitado la contratación de más de 2.000 sanitarios, porque hay personal que está trabajando “18 horas”. “A veces se dice que no hace falta, pero hay que estar a la espera y preparados para cuando llegue el brote”, ha agregado.

Por último, Legido-Quigley ha valorado la postura de algunas comunidades autónomas que han decretado la obligatoriedad de llevar la mascarilla incluso por la calle y cuando hay distancia social. La doctora lo ve bien y ha compartido el caso de Singapur: “Siempre llevamos mascarilla y hay menos infecciones y menos muertos. Tenemos que concienciar de que la evidencia existe. Un estudio en Alemania dice que cuando las mascarillas se hacen obligatorias, las infecciones bajan un 50%”.

La experta tiene claro que es un elemento de protección que es eficaz: “Que la población tenga claro que funcionan. Son pesadas, a nadie nos gustan, pero tenemos que llevarlas por nosotros y para no contagiar al resto de las personas. Son muy útiles. Va a venir muy bien que se hagan obligatorias”.