CORONAVIRUS

Una científica de Hong Kong acusa a China de mentir sobre el coronavirus

Li-Meng Yan, que ha huido a Estados Unidos por las amenazas, afirma que en diciembre ya se conocía la enorme capacidad de contagio del COVID-19.

Una científica de Hong Kong acusa a China de mentir sobre el coronavirus

Li-Meng Yan, una científica de Hong Kong, lleva meses acusando al Gobierno chino de ocultar datos fundamentales sobre la pandemia de coronavirus, y de ser consciente de la gravedad de la situación mucho antes de lo que informaron. La investigadora, que huyó de su país y se ha exiliado en Estados Unidos, realizó un estudio a instancias de su jefe en el que quedó clara la facilidad con la que el nuevo patógeno se transmitía, y el número potencial de muertes que esto podía provocar. Sin embargo, y según sus denuncias, las autoridades desacreditaron su historia, y además recibió amenazas de muerte si no dejaba de hablar.

La historia de Yan comienza a finales del año pasado, cuando uno de sus superiores le encargó que investigase la acumulación de casos positivos de coronavirus en China. El Gobierno de ese país ya había prohibido que los investigadores extranjeros pudieran realizar estudios en el terreno sobre la crisis sanitaria, lo que provocó que la científica contactase con algunos compañeros y amigos para que le diesen información. Uno de ellos le informó el 31 de diciembre sobre la facilidad en que el coronavirus se transmitía entre personas, y la posibilidad de que este contagio se extendiese por todo el mundo.

Unos días después, la OMS publicó un comunicado en el que afirmaba que el virus no se transmitía fácilmente. A partir de ahí, muchas de las fuentes de Yan dejaron de hablar con ella del coronavirus. “No podemos hablar de ello, pero hay que llevar mascarilla”, le dijo un médico. En esos momentos, la transmisión del virus ya había crecido, y ya se habían registrado casos fuera de China. Además, Yan empezó a recibir amenazas para que dejase de investigar. Después de compartir la información con un bloguero de Hong Kong que vivía en Estados Unidos, Li-Meng Yan dejó Hong Kong con destino a Los Ángeles el 28 de abril para no volver.

China mantiene que la pandemia se ha gestionado bien

Una vez allí, y ante el temor de ser deportada, la científica contó su historia a las autoridades, que le permitieron entrar en el país. Pese a las denuncias de Yan, China mantiene que su gestión de la pandemia fue excelente, que la reacción fue rápida y que se salvaron muchas vidas. La OMS también niega haber cometido errores en este tiempo.

Las acusaciones de Li-Meng Yan han provocado que la Universidad de Hong Kong, donde trabajaba, haya eliminado su página de internet y haya publicado un comunicado en el que informaba de que ya no era miembro del centro. Pese a todo esto, la científica ha asegurado que seguirá informando sobre los resultados de su investigación, que probarían según ella que China no dijo toda la verdad sobre el COVID-19.