La vacuna para la malaria podría ser clave contra el coronavirus
Investigadores australianos han dado con lo que podría ser la base de una vacuna, que permitiría crear protecciones para los pulmones.
La búsqueda de una vacuna contra el coronavirus centra la actividad científica del mundo; son más de 120 los proyectos bajo el paraguas de la OMS que se están llevando a cabo en este momento. Pero otras investigaciones no paran y, de hecho, podrían tener utilidad en la batalla contra la COVID-19. Como es el caso de la posible vacuna contra la malaria que investigadores australianos afirman haber encontrado.
Dicen haber dado con un "ingrediente secreto" que podría ser la base de una vacuna contra el paludismo, enfermedad que se transmite mediante la picadura de un mosquito y que hasta ahora no tiene vacuna, sólo una profilaxis química que previene de contraer la enfermedad. Una enfermedad, la malaria, con síntomas compartidos con la COVID-19: tos, fiebre alta, dolor muscular, naúseas... Y de hecho, en varios países, incluida España, se están utilizando contra el coronavirus medicamentos inicialmente indicados para la malaria, como la cloroquina o la hidroxicloroquina, sobre todo en la fase inicial de la enfermedad.
Ese nuevo tipo de vacuna, basado en la reeducación del sistema inmunitario en lugar de en la creación de anticuerpos, podría tener gran utilidad a la hora de luchar contra el coronavirus: "El virus golpea a los pulmones muy fuerte. Con algunos trucos, podemos crear inmunidad protectora en el pulmón. Podemos usar esta estrategia para crear células asesinas que estén listas y esperando algo como un coronavirus que pueda infectar el pulmón. Y eliminarlo antes de que realmente se afiance", expica Caminschi.
De momento la vacuna sólo se ha probado en ratones, pero los resultados hasta el momento son muy esperanzadores, pues los roedores son muy propensos a sucumbir a la malaria. El siguiente paso es la prueba en humanos.