Así será la reapertura de las tiendas y centros comerciales: aforo, probadores, prendas...
Los establecimientos de ropa y las grandes superficies deberán seguir una serie de recomendaciones para minimizar el riesgo de contagio.
El Gobierno ya ha presentado el plan de desescalada y ahora las diferentes actividades económicas se preparan para su vuelta. Las tiendas y los centros comerciales ya saben cuándo podrán reabrir según las fases que ha diseñado el Gobierno. En la fase 1 (11 de mayo) podrán abrir las tiendas que no estén situadas en centros comerciales, pero con una limitación del 30% del aforo. En la segunda fase se incorporarán las tiendas de las grandes superficies y la limitación subirá al 40%. Ya en la fase 3, el aforo será del 50%.
Pero no será la única restricción que tendrán las tiendas y los centros comerciales. El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo ha elaborado una guía de buenas prácticas dirigida a la actividad comercial en establecimientos físicos de cara a su reapertura. Además de las ya sabidas medidas de higiene, recomendado uso de mascarillas y mantenimiento de la distancia social, las tiendas de ropa deberán adaptarse a la nueva situación que ha provocado el coronavirus.
Probadores cerrados o abiertos parcialmente
Los establecimientos textiles que tengan probadores deberán decidir entre cerrarlos de forma temporal o abrirlos parcialmente, de tal forma que se alterne uno abierto con uno cerrado para minimizar el riesgo de transmisión del virus. Asimismo, el documento recomienda una ocupación máxima de una persona por probador, salvo en casos excepcionales. Además, se pide que se limpien los habitáculos tras cada uso. En caso de que el probador se cierre mediante cortina, se aconseja si es posible su sustitución por una puerta o si no se puede evitar tocarla con las manos.
Desinfección de prendas
Las prendas que hayan sido utilizadas por los clientes en los probadores deberán ser desinfectadas o puestas en cuarentena durante 48 horas, manipulando éstas con guantes desechables. En este sentido, se recomienda facilitar a los consumidores guantes para evitar contagios al tocar las prendas. Por último, los compradores deberían pagar con tarjeta contactless para evitar al máximo el contacto con los trabajadores y con las pantallas de pago.
Conteo de personas para controlar el aforo
Los centros comerciales también tendrán que readaptar sus superficies para cumplir con las medidas de higiene y seguridad y para no favorecer la propagación del virus. Dado que el aforo estará limitado al menos en las fases de desescalada (en la nueva normalidad está por decidir), el Gobierno aconseja establecer un sistema de conteo de personas, incluido en el aparcamiento. Asimismo, el personal de seguridad deberá controlar que se mantiene la distancia de seguridad deseada de dos metros y los clientes no podrán ir en grupo, máximo dos personas juntas.
Evitar el uso de ascensores
En cuanto a la utilización de ascensores y escaleras mecánicas, la guía del Ministerio pide que no se empleen los ascensores salvo en caso de necesidad física y se evite tocar los pasamanos en las escaleras. Antes de proceder a su reapertura, se debe limpiar y desinfectar de forma completa el centro comercial, con especial atención a baños, aparcamiento y zonas de descanso.
Cierre de zonas infantiles y de descanso
En cuanto a las zonas comunes y de mayor tránsito, los centros comerciales deberán cerrar las zonas infantiles y las zonas de descanso, instalar mamparas y geles desinfectantes en puestos de atención al público y deberán desactivar las pantallas táctiles para evitar su manipulación. Además, no podrán organizar actividades dentro del centro que puedan producir aglomeraciones.
Señalización de la distancia de seguridad
Para cumplir con la distancia de seguridad entre clientes, se recomienda señalizar el suelo con vinilos marcando los dos metros deseados, tal y como han hecho muchos supermercados. Además, piden valorar el establecimiento de sentidos de circulación por el centro comercial, para que el tránsito de los clientes sea más ordenado y a la vez seguro.
En definitiva, la reapertura de las tiendas y los centros comerciales sufrirán un brusco cambio y nada será igual a como antes se compraba, al menos por un tiempo. La ciudadanía y las actividades económicas deben empezar a convivir con el coronavirus con la intención de tener el mayor éxito posible. Es la transición hacia una nueva normalidad.