Los hogares españoles han comenzado a estabilizar las compras de alimentos, según se desprende de los datos del Análisis de consumo en el hogar, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. No obstante, si comparamos la situación actual en pleno estado de alarma con el mismo período del año pasado, el volumen de compra de alimentos ha experientado una subida del 36,2 por ciento.

En este sentido, los productos frescos están muy presentes en las cestas de la compra. Fruta, verdura, pescado o carne son productos cuya compra y nivel de consumo se ha multuplicado exponencialmente en las ñultimas semanas, lo que irremediablemnete aumenta también el riesgo de que no seamos capaces de consumir todo en timepo y forma, y desperdiciemos alimentos.

Datos para el sonrojo

Un problema con más impliciones de las que podríamos pensar. Sin ir más lejos, sefún datos de la FAO, en el mundo se desperdician al año 1.300 toneladas de alimentos (7,7 en España) el equivalente a las siguientes cifras:

- Huella hídrica: en los alimentos desperdiciados se gasta tanta agua como 100 millones de piscinas olímpicas.

- Coste económico: el valor del desperdicio equivale al PIB de países como Suiza o Turquía.

- Huella de carbono: el despredicio genera emisiones como 550.000 millones de coches al año.

- Uso de suelo: se dedica una si¡uperficie equivalente a 1.400 millones de campos de fútbol al desperdicio alimentario.