La población mundial ha experimentado un envejecimiento significativo en las últimas décadas y es un proceso que lejos de menguar, irá en aumento. De hecho, la población española mayor de 65 años ha pasado del 11,2% en 1981 al 18,2% en 2013, y se espera que para 2050 ya suponga más de un tercio del total. Por ello, mantener la capacidad de trabajar y ganarse la vida, la independencia y la autosuficiencia en la vida cotidiana y el tiempo libre, será cada vez más importante en las próximas décadas.

Y cada vez son más las evidencias que apuntan a la promoción del ejercicio físico como un aspecto fundamental en el bienestar y envejecimiento saludable de las personas. Una nueva muestra de ello es la investigación realizada por expertos del Universidad Católica de Murcia (UCAM) que concluye que el entrenamiento de fuerza ofrece grandes resultados en mayores de 65 años.

Resultados en 12 semanas

Los resultados del estudio, publicados en la revista 'Scientific Reports', del prestigioso grupo Nature, certifican que el entrenamiento de fuerza, a través de un circuito de resistencia de intensidad moderada a alta, logra unos efectos muy positivos en diferentes parámetros de composición corporal, autonomía funcional, fuerza muscular y calidad de vida en ancianos en tan solo 12 semanas.

“El entrenamiento de fuerza en circuito con cargas moderadas a altas es un programa necesario en mayores de 65 años, ya que genera mejoras en parámetros de salud y rendimiento físico, prolongando el envejecimiento con independencia funcional y salud. Con ello se ayuda a los mayores a vivir con autonomía y determina incluso dónde van a vivir, dependiendo de si necesitan o no cuidados y de qué tipo”, explica el doctor Pablo Jorge Marcos-Pardo.

“Además, es necesaria la supervisión y dirección de un Educador Físico-Deportivo, que es el graduado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, quien les diseñará el mejor programa, adaptado a sus antecedentes médicos y físico-deportivos y a su nivel”, concluye.