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La transformación de Ibai Gómez: puro músculo al servicio del Athletic

El futbolista abandona el Alavés para regresar al Athletic Club, aunque ha sido en Vitoria donde se ha consagrado y ha logrado transformar su físico para llevar su rendimiento a un nuevo nivel.

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Juan Manuel Serrano Arce Getty Images

"El Alavés ha sido mi vida a lo largo de estas dos temporadas y media, me he entregado y esforzado cada día al máximo. He aprendido, he reído, he llorado, he gritado y he disfrutado como un niño. Gracias". Ibai Gómez deja Vitoria para volver a Bilbao después un periplo que puede tildarse de exitoso tanto para el club como para el propio jugador, ya que el Alavés ha logrado asentarse en la máxima categoría del fútbol español e Ibai Gómez ha elevado su nivel de juego hasta el punto de tener la oportunidad de regresar a su casa.

Y esa mejoría puede achacarse tanto a su madurez como futbolista, tiene 29 años en la actualidad y mucha experiencia a sus espaldas, como a una inquebrantable profesionalidad que le ha llevado a exigirse el máximo para protagonizar una impresionante historia de transformación bajo la atenta supervisión de su entrenador personal, Adolfo Madrid, que también trabaja con Marcos Llorente, Borja Mayoral o Luca Zidane, entre otros futbolistas de élite.

Dos años de duros entrenamientos

No es que Ibai Gómez no estuviera en forma, pero después de trabajar durante dos años a las órdenes del preparador físico los resultados son más que aparentes y su mejora física se ha traducido en grandes actuaciones sobre el terreno de juego.

Ya sea en pequeñas concentraciones antes de iniciar la temporada o durante la misma, Adolfo Madrid ha seguido muy de cerca las evoluciones de sus pupilos y muy en particular la del centrocampista vasco, que vuelve al Athletic Club por la puerta grande y más preparado que cuando abandonó el club en el verano de 2016.

Más fuerte, más rápido y más explosivo. Así regresa Ibai Gómez a San Mamés después de ganarse el cariño y la admiración de toda la familia del Alavés. Se marcha de un club en puestos de Champions League para enrolarse en las filas de un histórico que lucha por alejarse del descenso. Pero a Ibai Gómez no le dan miedo los retos. Y está preparado.