Carles Puyol siempre ha hecho gala de una especial preocupación por cuidarse. Más allá de las lesiones propias de su profesión y que a la postre le obligaron al colgar las botas, el ex futbolista de Pobla de Segur, que actualmente tiene 40 años, siempre ha dado muestras de tener una excelente preparación física y en la actualidad sigue entrenando como si le fuera la vida en ello. No para.

Cuatro años después de su retirada, el mítico capitán del Barça, que alcanzó los 100 partidos como internacional con la selección española, no ha dejado de experimentar y disfrutar con el deporte. A lo largo de todo este tiempo, Puyol ha matado el gusanillo con actividades alejadas del fútbol y otras no tanto que, en muchas ocasiones, perseguían un fin solidario o relacionado con el fomento de hábitos saludables. Retirado del fúbol, pero no del deporte:

Running

Como si de una pretemporada se tratase, el que fuera defensa imprescindible para todos sus entrenadores y equipos, sigue disfrutando del running cada vez que tiene la ocasión y habitualmente se le puede ver poniéndose a punto.

Pádel

Una de sus aficiones favoritas que no duda en practicar siempre que puede con ex compañeros de profesión como Fransceco Totti, que también se retiró hace poco más de un año, o con algunos futbolistas del Barça como Busquets, Piqué o Jordi Alba. También con su inseparable amigo Xavi Hernández.

Boxeo (de aquella manera)

Sí. Carles Puyol también ha hecho sus pinitos golpeando el saco para liberar el estrés, pero su técnica dista mucho de estar depurada y no se sabe muy bien quién se impone en ese combate desigual.

Teqball

El exfutblista catalán también ha probado suerte con el teqball, una modalidad deportiva que se practica sobre una mesa similar a la de pin pon aunque curvada. “Fantástica experiencia con teqball, un deporte muy completo con el que se pueden entrenar aspectos técnicos del juego y pasarlo bien a la vez. Partidas rápidas y muy competitivas. Muy recomendable tanto para los jóvenes que empiezan como para los profesionales”, asegura.

Deportes acuáticos

En más de una ocasión se ha podido ver a Puyol disfrutando del mar y de los deportes acuáticos, solo o en compañía de su pareja, Vanesa Lorenzo, y prefereiblemente en Ibiza o en Formentera donde el catalán acude con cierta frecuencia.

Yoga

Conviviendo con una experta en la materia como Vanesa Lorenzo, autora del libro ‘Yoga: un estilo de vida’, era cuestión de tiempo que Carles Puyol se aficionara al yoga y lo practicara en pareja. Hay que aprovechar cuando tienes a la profesora tan cerca.

Automovilismo

También ha demostrado el ex jugador ser un apasionado del deporte de las cuatro ruedas y ha tenido la oportunidad de subirse a un biplaza de la F1 para vivir una experiencia cargada de adrenalina a velocidades de vértigo.

Gimnasio

Como no podía ser de otra forma, Puyol también pasa horas en el gimnasio trabajando la musculatura o, como él dice, “explorando nuevas disciplinas de entrenamiento”. Y es que el catalán no le hace ascos a nada.

Baloncesto (en silla de ruedas)

“Me siento orgulloso de ser patrón de la Fundación Cruyff y formar parte de un equipo que está haciendo un trabajo increíble, ayudando a más de 300.000 niños en más de 20 países a superar dificultades y poder practicar deporte”, asegura Puyol dando muestras de su faceta más solidaria.

Gimnasia rítmica (más o menos)

Otro ejemplo del carácter solidario de Carles Puyol. No es que se le vean trazas de gran gimnasta, pero como reza el spot de los Jocs Special Olympics 2018 que protagoniza, el mejor es quien lo intenta.

Fútbol (como no)

La cabra siempre tira al monte y Carles Puyol es un apasionado del deporte que practicó profesionalmente durante tantos años por lo que es habitual verle participar en ‘pachangas’ de diversa índole en las que, por si había alguna duda, no se guarda nada. “Competir es pasión, motivación, concentración y esfuerzo”, comparte.