Desde 1975, la obesidad se ha casi triplicado en todo el mundo, según afirma la Organización Mundial de la Salud. Datos que en 2016 mostraban ya más de 1900 millones de adultos de 18 ó más años con sobrepeso, de los cuales, más de 650 millones eran obesos.

La mayoría de la población mundial vive en países donde el sobrepeso y la obesidad es una constante. Un dato que está en el extremo opuesto a la desnutrición, los dos problemas del siglo XXI y que más afectan a la población. ¿Qué se puede hacer?

Consecuencias de la obesidad

Algunas de las consecuencias comunes del sobrepeso y la obesidad para la salud, el hecho de tener un índice de masa corporal:

-las enfermedades cardiovasculares, sobre todo las cardiopatías y los accidentes cerebrovasculares, que fueron la principal causa de muertes en 2012

-diabetes

-trastornos del aparato locomotor, sobre todo osteoartritis

-cánceres de endometrio, mama, ovarios, próstata, hígado, vesícula biliar, riñones y colon...

-mayor aumento del IMC

-el riesgo de obesidad infantil augura riesgos graves de mayores, como muerte prematura, discapacidad adulta, enfermedades respiratorios, fracturas, hipertensión...

Cómo combatir la obesidad

No es sólo hacer ejercicio, es tener una vida saludable en muchos aspectos, sobre todo en torno a la dieta. Pedir ayuda a un endocrino, pedir apoyo familiar... en muchos países, sobre todo en Estados Unidos donde la obesidad es un problema muy grave, sigue siendo más barato un menú de comida rápida que comprar productos frescos.

Un cambio contra la obesidad se enmarca en un grupo de acciones:

-ejercicio diario para los adultos, aunque sea un mínimo

-cocinar a menudo

-hacer la compra de productos frescos siempre que se pueda

-desterrar productos congelados, procesados

-eliminar la comida rápida

-involucrar a la industria alimentaria, sobre todo en la producción de alimentos con grasas, azúcares...

-un detalle que se olvida, muchos restaurantes no ofrecen fruta fresca en sus postres, siempre son dulces, helados...

Un código de colores en los alimentos

De la misma manera que Chile creó un sistema de pegatinas, España ha decidido crear un sistema de códigos de colores. Lo ha anunciado la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luis Carcedo;  será un sistema que facilitará al ciudadano información precisa sobre la calidad nutricional del producto. Este código, conocido como Nutriscore, se empezará a ver en los supermercados dentro de poco, y será obligatorio dentro de un año.

El código de cinco colores consiste en un gráfico con coloración gradual del verde al rojo en cinco niveles al estilo de un semáforo, de tal forma que los verdes identificarán los productos más saludables y los rojos los de menor calidad nutricional.