Mucho se habla de los tatuajes de los futbolistas, de su exceso sobre todo. Hoy en día no hay jugador profesional que no lleve en su piel un poco de su historia, bien sea por hijos, padres, ídolos, temas religiosos o trofeos ganados. Pero hay un jugador que tiene la piel sin mácula: Cristiano Ronaldo.

El diario británico Mirror publicaba hace unos días la posible razón: la donación de sangre. Tras cada tatuaje, si eres donante, debes esperar al menos cuatro meses para poder hacer una donación, una manera de evitar transmitir posibles infecciones. Y Ronaldo en 2017 donó dos veces, como bien documentó en sus redes sociales. Cruz Roja sitúa el tiempo de espera para ser donante en ese mismo tiempo, 4 meses desde que se hace el tatuaje.

Esta campaña con Give Blood está siendo muy efectiva, ya que de una sola donación pueden tener sangre en situaciones de emergencia hasta para tres pacientes. Ronaldo declaró que quería con esta acción “alentar a las personas de todo el mundo a convertirse en donantes de sangre de por vida y ayudar a salvar vidas".

El delantero del Real Madrid no sólo es donante de sangre, también lo es donante de médula tras hacerse pruebas cuando el hijo de su compañero Carlos Martins estuvo enfermo. No es más que extraer sangre, no duele”, afirmó para concienciar también a la sociedad de un acto sencillo que puede salvar muchas vidas.

En España la donación de médula se multiplicó de manera exponencial con el caso del malagueño Pablo Raéz. Sólo en Málaga, se incrementaron un 300 % en el 2017. El requisito para ser donante es tener entre 18 y 55 años, estar sano y someterse a una analítica de sangre. El donante ideal es una persona joven, que tenga entre 18 y menos de 40 años, para que si se puede encontrar una persona compatible, haya más tiempo.