La importancia de la podología mecánica es fundamental en la alta competición. Los estudios biomecánicos garantizan, de manera personalizada, que el calzado deportivo se adapta en cada detalle y fisionomía al pie del profesional. Es por ello que previenen lesiones, permiten una mejor evaluación de patologías… Una manera además de potenciar y tratar cualquier mínimo desajuste.

El estudio biomecánico de la marcha o de la pisada es un análisis del pie en posición estática y dinámica, así como su relación con otras estructuras como la rodilla, la cadera o la columna. Si el pie no realiza una pisada correcta es posible que rodilla, cadera y hasta la columna no realicen un funcionamiento adecuado y el movimiento no sea el correcto.

Para evitar lesiones musculares y osteoarticulares como los esguinces de repetición, las metatarsalgias, las fascitis plantares, los espolones calcáneos, las tendinitis, incluso las sobrecargas musculares, las condropatías, o las basculaciones pélvicas, alguna de las lesiones más comunes y habituales de muchos deportistas.

Tras operaciones, además, se puede analizar tanto antes como después cómo quedan diferentes lesiones y la repercusión en la cadena osteoarticular. Si la pisada ha variado, o no; si la fuerza es la adecuada; si el peso se ha modificado y la carga modifica la posturología.

Álvaro Morata es uno de los últimos futbolistas que está tratando de mejorar cada faceta de su juego. Recientemente ha acudido a tratarse con el podólogo especialista Jose Víctor Alfaro, de Podoactiva.