Que Donald Trump es un hombre de excesos es algo que sabemos. Que le gusta la comida rápida, la comida basura, también. Ahora bien, que es tan fan de McDonald’s como consumir en ocasiones hasta 2.500 calorías lo acabamos de descubrir en el libro ‘Let Trump Be Trump: The Inside Story of His Rise to the Presidency’, escrito por sus colaboradores Corey Lewandowski and David Bossie.

Según los autores del libro, y que han estado muy cerca del presidente durante la campaña electoral, una cena típica de Trump estaría compuesta por:

-dos Big Mac

-dos sándwich de pescado

-un batido de chocolate

La suma de este pedido aparentemente habitual en el presidente Trump equivale a 2.672 calorías. Recordemos que Trump tiene 71 años y no hace deporte, es una persona sedentaria con estrés, horarios complejos y una mala alimentación.

Durante la campaña electoral le dijo al periodista Bill O'Reilly que el sándwich de huevo y bacon de McDonald’s era también de sus favoritos (con un extra de queso, salsa y pan).

De hecho, el desayuno favorito de Trump, que se despierta a las 5 a.m., revisa Twitter, y a veces no desayuna hasta casi el almuerzo, es bacon poco hecho y huevos muy pasados, tal y como él ha confesado. Si puede, lo ha dicho habitualmente, se salta la primera comida del día. Prefiere almorzar directamente. Su momento del día favorito es la cena, como nos ha quedado claro con su pedido habitual a la cadena de comida rápida.