Valverde descubre Caravaca, final inédito en La Vuelta
El del Movistar reconoce con AS el puerto murciano, nueva llegada en alto en La Vuelta. “Me ha sorprendido. Es una subida exigente y muy bonita”, explica.
La Vuelta, como es costumbre, cada año descubre nuevos rincones, finales en alto que adquieren más relevancia con el paso de la carrera. Uno de ellos este año será en las carreteras murcianas, en Caravaca de la Cruz. No es una localidad que no conozca la carrera, pues fue partícipe en tiempos no muy lejanos, pero lo que es novedoso es su final. Será en un puerto, el Collado de Caravaca de la Cruz. En otros tiempos, era una llegada para velocistas… y con este inédito desenlace, los escaladores serán esta vez los protagonistas.
Estando en Murcia, AS contó con el local más ilustre para reconocer el puerto: Alejandro Valverde. El de Las Lumbreras, localidad a 80 km de Caravaca, no conocía la ascensión, ya que está algo retirado de su zona de recorrido habitual. Hizo su entrenamiento como cada mañana, pero esta vez cambió de ruta. Acudió en coche con dos compañeros de grupeta a Mula, allí aparcaron y empezó el entreno, poniendo rumbo a Caravaca. En la localidad, y tras un giro a izquierdas en una gasolinera, empieza la ascensión. Previamente, El Bala visualizó el perfil. Todo listo. Dentro de la población, con algunos habitantes locales que miraban con cara de incredulidad a Valverde, además de algún grito de ánimo cuando se percataron de que sí, que era él, arrancó el reconocimiento a la ascensión, que se encontraba en proceso de asfaltado para llegar en las mejores condiciones a La Vuelta.
“Pensaba que era menos exigente por el desnivel medio que tiene, pero que va”
Eso no fue un impedimento para un corredor que ganó casi todo lo que tenía en su mano durante dos décadas. El puerto está catalogado de segunda categoría (8,2 km al 5,5%), pero que esa distinción no lleve a pensar que es más ‘asequible’. El porcentaje medio baja porque en la subida hay varios tramos, cortos, de descenso. “¡Me ha sorprendido! Pensaba que era menos exigente por el desnivel medio que tiene, pero que va. Es así por los varios descansos que hay, pero lo que es subida prácticamente no baja del 9, 10, 12, 13%... es un puerto exigente que hará daño”, analiza una vez acabado el puerto tomando un café con sacarina y una tosta de queso fresco a la plancha. La etapa, la novena de esta edición, se disputará el 3 de septiembre, un domingo, justo antes del primer día de descanso. Servirá para cerrar el primer tercio de carrera.
“Es una subida en la que se empezará rápido, con unas primeras rampas exigentes. El ritmo será fuerte y los líderes arrancarán alrededor de a tres km del final”, añade Valverde, en su primer año como corredor retirado. “En esta parte de la etapa los que estén delante serán los gregarios-escaladores. Hoy en día, los compañeros últimos que quedan con sus líderes pueden ser líderes en otras carreras. Es una zona desprotegida, pero no sé si el viento afectará mucho. A mí me daba de culo. Calculo que la subida estará entre 20-22 minutos, y habría que probarlo en el tramo del 20%. Luego viene un descanso, que ahí no te tienen que quitar nada y, después, parte final a tope hasta meta”, visualiza Alejandro.
“Me recuerda a Mas de la Costa, donde gané”
Una subida que, tras este reportaje, ya conoce y que a buen seguro explicará de manera detallada en el Movistar, su equipo, al que sigue ligado. ”Sí, les diré varios detalles porque me llamó la atención. Hay algunas curvas de bajada en las que hay que tener cuidado, porque son técnicas y con desnivel. Creo que podrán mover unos 390-400 vatios. Es un puerto explosivo para un escalador que acepte cambios de ritmo porque tiene bajadas, subidas, descenso... es rompepiernas, y muy bonito”, añade el que fuera ganador de la ronda española en 2009, con 12 etapas en su haber. El propio Valverde, que no descarta volver en un futuro a esta subida, pronostica un desenlace: “En solitario es difícil que llegue el ganador. Diría que un grupo reducido, de cinco-seis corredores. Roglic, Vingegaard, Ayuso, nuestro Enric Mas... a todos les viene bien. Me recuerda a Mas de la Costa (2019), donde gané”. Y quién sabe si hoy en día estaría en la lucha.
La meta de esta jornada montañosa de La Vuelta será en un helipuerto. De esta manera, y tras una curva a derechas, los corredores se encontrarán con el arco de llegada. Un terreno pequeño, con capacidad para un helicóptero en un nuevo rincón al que La Vuelta dará más visibilidad tras la etapa de este año. Valverde coronó en este punto tras una ascensión en la que subió contemplando la zona... y a gran nivel, ya que sigue con su ritmo de entrenamiento de cuando era profesional: “Será una etapa que no defraudará”, dice El Bala.