Otro día de caídas en el Tour: Roglic, López, Thomas...

“Soy padre de familia y no quiero que mi hijo se dedique al ciclismo profesional después de lo visto. Esto ya no es ciclismo. Tenemos que cambiar, las cosas no funcionan. Los organizadores deben replantearse sus recorridos. Si no, habrá muertes. Nuestro deporte me parece indigno”. Enrojecido de furia, Marc Madiot, mánager del Groupama, se despachó a gusto contra el Tour. Por la mañana, la Asociación de Ciclistas Profesionales (ACP) avisó de lo peligroso del trazado, intentó que se ampliara el límite de seguridad de los últimos tres a cinco kilómetros… pero las negociaciones no fructificaron. Si a los nervios de la primera semana se unen curvas, badenes, carreteras estrechas y bañadas por la lluvia, las caídas se multiplican. Robert Gesink, Jack Haig y Caleb Ewan abandonaron, mientras Primoz Roglic y Superman López cedieron 1:21 en meta. Enric Mas, Kelderman, Nairo, Fuglsang y Nibali perdieron 14 segundos respecto a Alaphilippe y Carapaz, y Pogacar, Thomas, Urán o Gaudu se dejaron 26". Otra carnicería en Bretaña.

Por partes. El primero en irse al suelo fue Geraint Thomas. “Se le soltaron las dos manos del manillar en un peralte. No sabíamos si podía continuar. Le animamos todo el rato. Con el final tan caótico al menos se motivó”, explicó Jonathan Castroviejo, quien le ayudó a reincorporarse al grupo junto a Rowe y Van Baarle. El galés se dislocó el hombro y acudió al centro médico móvil para una revisión, en la que recibió luz verde. Robert Gesink se rompió la clavícula al no lograr esquivarle.

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Un embotellamiento a 11 km de la llegada se tradujo en otro percance para Superman, gafado en este arranque de Tour. Arcas le dio su bici y Valverde, Erviti y Verona se quedaron para que las diferencias no se dispararan. A diez, Primoz Roglic salió rebotado hacia la cuneta. “Está magullado y dolorido, como mínimo. Verificamos el coxis con unos rayos X (le trasladaron en ambulancia). Los muchachos dicen que otro (Colbrelli) le golpeó y provocó que volara”, desveló Richard Plugge, mánager del Jumbo. Kruijswijk sufrió profundos cortes en ese mismo incidente. A cuatro, Jack Haig, sexto de la clasificación hasta la fecha, también se estampó en una curva muy cerrada y se retiró. Haller, su compañero en el Bahrain, Démare o Cavendish tampoco se libraron.

Por último, Ewan perdió el control de su bicicleta en la volata, se estrelló violentamente y Sagan chocó contra él. El australiano se fracturó la clavícula y le evacuaron inmediatamente al hospital, con el eslovaco tocado por múltiples contusiones y erosiones. “Curioso cómo la UCI prohibió las posiciones de super-tuck y antebrazos por razones de seguridad, al mismo tiempo que disfrutamos de finales como el de Pontivy en el Tour. La seguridad de los corredores debería anteponerse a todo lo demás”, resumió Simon Geschke.