El año de Superman

Miguel Ángel López, el líder colombiano del Astana, cumplirá en febrero 26 años, pero él ya se considera “un viejito” por su experiencia. Llegó al equipo kazajo en 2015, y desde entonces se ha labrado una trayectoria que le acredita como una de las grandes figuras del pelotón: podios en Giro y Vuelta, generales de una semana tan prestigiosas como Catalunya o Suiza, 15 victorias… Pero Superman, como le llaman desde muy joven tras defender su bicicleta de un robo con arma blanca, nunca ha probado en el Tour.

En este 2020 sus planes le llevarán a debutar en Francia. “Todo el mundo dice que es algo diferente. Estos años Fuglsang estaba centrado en él y a mí no me importó realizar otro calendario. Pero para 2020 creo que el trazado me va bien e iré con ganas de hacerlo lo mejor posible, aunque soy consciente de que no conozco la carrera”, reflexiona para AS.

A lo que no renunciará será a esa ofensiva forma de correr que le ha convertido en un ciclista espectacular, de constantes ataques. “Desde pequeño siempre me ha gustado atacar. Disfruto mucho más con una victoria de manera ofensiva que arrancando en el último kilómetro. Y pienso que el aficionado también lo agradece. Este 2019 seguí el Tour por la televisión junto a mi familia. Una cita histórica para Colombia por el triunfo de Egan Bernal. Pero, desde mi punto de vista personal, a la competición le faltó algo hasta los últimos días. Hubo pocos ataques y fue algo aburrida”, explica.

¿Solucionará Superman esa falta de espectáculo en 2020? “No sé (risas)… Está claro que hay que atacar con cierta cabeza, no vale de nada si en unos metros vuelves a estar detrás y vacío”. Lo que sí sabe es que el Astana no dudará en trabajar a bloque para dinamitar el Tour en su beneficio, una formación que contará con seis españoles: “Son muy importantes para mí. Luis León entró el mismo año que yo, y le considero un amigo al que afortunadamente tengo siempre en la carretera. También Omar, los Izagirre… y las dos nuevas incorporaciones, Óscar Rodríguez y Alex Aranburu. Integramos un bloque latino muy agradable”.

Será clave ese buen ambiente en el 2020 después de un 2019 en el que quedó séptimo en el Giro y quinto en la Vuelta: “Siempre pasaba algo extraño. En el Giro me encontraba muy bien, pero me fallaba la bici, pinchaba… No tuve ese pelín de suerte necesario. Para conquistar una ronda de tres semanas debes ser el más fuerte… y disponer de la fortuna del campeón”.

Varias caídas le mermaron en la Vuelta, incluida esa famosa, camino de Toledo, en la que cargó duramente contra el Movistar, algo a lo que le quita hierro. “Fue el calentón y la rabia del momento tras ver que se había producido una caída masiva y que otro conjunto hacía como si no pasara nada. Pero eso no conlleva un mal recuerdo, la Vuelta es una carrera que me encanta”, afirma de la prueba española, que apunta a que será la segunda grande de una temporada clave en su porvenir. Superman quiere que 2020 sea su año.