Las Chicas Bellas son talismán para el maillot amarillo

EI puerto clásico de los Vosgos había sido históricamente el Ballon d'Alsace, el Balón de Alsacia, la primera montaña que se subió en el Tour, allá por 1905, pero en los últimos tiempos ha tomado el relevo La Planche des Belles Filles, que hoy acoge la meta por cuarta vez en ocho ediciones. En las tres visitas precedentes se ha cumplido la misma premisa: el ciclista que prendió el maillot amarillo se coronó también en los Campos Elíseos. Un dato que aumenta su valor por el hecho de que La Tabla de las Chicas Bellas siempre se ha subido en la primera mitad del recorrido. Vamos año a año:

7ª etapa de 2012. Chris Froome, que debutaba en el Tour al servicio de Bradley Wiggins, respondió al ataque del campeón del año anterior, Cadel Evans, y se adjudicó la victoria. Era su primera etapa en la ronda francesa, donde ya suma siete. Wiggins resistió también al australiano y se enfundó el maillot de líder, que exhibió durante 14 días hasta llegar a París.

10ª etapa de 2014. Vicenzo Nibali hizo doblete: ganó la etapa y recuperó la túnica que ya había vestido durante siete días, para conservarla durante otros 12 hasta el final. Alberto Contador había abandonado ese mismo día por una caída en el descenso del Petit Ballon. Froome ni siquiera tomó la salida, porque se había despedido en la jornada de pavés.

5ª etapa de 2017. Fabio Aru conquistó la etapa con un ataque a 2,5 kilómetros y Chris Froome, que entró tercero a 20 segundos, arrebató el maillot a su compañero Ge­raint Thomas. Fue líder durante siete jornadas, pero en los Pirineos perdió la prenda en favor del propio Aru, a quien sólo le duró dos días la alegría. Froome volvió a ponerse al frente de la general y ya no cedió más la posición. En total, 15 etapas de amarillo.