El grito que dio Ben King, ciclista norteamericano nacido en Richmond hace 29 años, cuando cruzó la línea de meta de La Alfaguara sonó por encima del barullo concentrado en la cima granadina. No era para menos, había conseguido el cuarto triunfo de su carrera, pero el de más prestigio (primero del World Tour) y también el primero fuera de Norteamerica. Una victoria para el excampeón norteamericano que llegó después de que se cumpliera su plan mucho mejor de lo esperado. “Estar en la fuga era el objetivo y era consciente de que podía ser una buena oportunidad para mí. Pero lograr una renta de diez minutos, con un grupo de buenos escaladores… se tienen que alinear muchas cosas para que suceda algo así. Es increíble”.

Una victoria muy importante para este corredor del Dimension Data que en las últimas fechas se hizo famoso por un hecho mucho menos agradable. Un despiste suyo en la Clásica de San Sebastián provocó la montonera en la que se cayeron Mikel Landa y Egan Bernal entre otros y que le hizo pasar un mal trago: “Si el afectado eres tú es horrible, pero si son otros es peor aún”.