Froome ya cimentó sus Tours de 2013 y 2015 en los Pirineos
El británico del Sky ganó en 2013 en AX3 Domaines y en la Pierre-Saint-Martin en 2015. En ambas ocasiones vistió el amarillo y lo aguantó hasta París.
Chris Froome ha demostrado un idilio con los Pirineos en las cuatro ediciones que ha disputado el Tour de Francia hasta la fecha. Salvo en 2014, donde no llegó a las etapas pirenaicas tras abandonar en la quinta etapa camino de Arenberg, en el resto de ediciones en las que ha competido el ciclista keniata (nacionalizado británico) del Sky ha conseguido grandes resultados en los puertos de esta cordillera, y en las ediciones de 2013 y 2015 cimentó su triunfo en la ronda gala con exhibiciones en puertos pirenaicos.
En 2012, Froome ya demostró sus habilidades en los Pirineos. Aguantó con el grupo de los favoritos en la etapa camino de Bagneres de Luchon (donde finaliza la etapa de este sábado tras subir el Tourmalet, la Hourquette d´Ancizan, Val Louron-Azet y Peyresourde) y en aquella ocasión se impuso Thomas Voeckler tras una larga escapada. En la etapa siguiente, Froome acabó segundo en la etapa con final en Peyragudes sólo superado por Alejandro Valverde. En esa edición, Froome acabó segundo en la clasificación general, sólo superado por su compañero de equipo y líder del Sky por entonces, el también británico Bradley Wiggins.
Froome regresó a los Pirineos en 2013, y la primera etapa de alta montaña de esa edición, dejó encarrilada la carrera. En la llegada a la cima de AX 3 Domaines, en la octava etapa, Froome se llevó el triunfo y sólo su gregario Richie Porte, que llegó a 51 segundos, fue capaz de aguantar su ritmo. Alejandro Valverde llegó a 1:08, y Nairo Quintana y Alberto Contador cedieron 1:45. Froome se puso líder tras esta etapa y desde entonces retuvo el maillot amarillo hasta París.
Tras su ausencia en 2014, donde abandonó en la etapa del pavés, Froome volvió a los Pirineos en 2015. Antes de llegar a la cordillera pirenaica, el británico ya vistió de amarillo tras la grave caída de Fabian Cancellara camino de Huy. Pero en la primera etapa de montaña de esa edición, Froome, que ya vestía de amarillo tras el abandono de Tony Martin, lo defendió con un duro ataque para ya no volverlo a soltar. En la Pierre de Saint-Martin, cima final de la séptima etapa, el británico del Sky dio un hachazo a las opciones de sus rivales en la general. Al igual que en AX3 Domaines en 2013, sólo Richie Porte fue el único capaz de seguirle el ritmo durante la subida al puerto pirenaico. Froome aventajó en 59 segundos al australiano, entonces gregario y este año rival en el BMC, en 1:04 a Nairo Quintana, en 2:01 a Valverde y en 2:51 a Contador para dejar cimentada buena parte de su victoria en el Tour de Francia 2015.