NBA | NETS 115 - CAVALIERS 108
Los Nets olvidan sus problemas para encaramarse a los 'playoffs'
Triunfo sobre los Cavaliers y puesto asegurado. Al ser séptimos tras este 'play-in' les tocará enfrentarse a los Celtics. Kyrie Irving llegará en forma ante sus ex.
Trabajo de introspección en los Nets para sacar el caché de favoritos. Lo tenían antes de la temporada, sabiendo que tenían un trío matador con James Harden, fue pasando el curso con derrotas sonrojantes y con Kyrie Irving fuera de acción por su negativa a la vacuna del coronavirus, de nuevo se les dio como posibles ganadores al ver cómo se habían reforzado en el mercado invernal y al tener a Kevin Durant a pleno rendimiento y, tiempo después, se la jugaban a -casi- todo o nada. Los neoyorquinos tenían la red de haber sido los séptimos clasificados en la Conferencia Este y que su trayectoria en el play-in se pudiera extender a dos partidos si no cazaban un puesto en las series por el título ya en el primero. No les ha hecho falta ir con todo para pasar satisfactoriamente la prueba.
Con un partido que sólo se complicó mínimamente al final, sobre todo por la insistencia de Darius Garland (34), y que acabó con 115-108 como resultado a firmar en el acta, los Nets amarran la séptima posición. Kyrie Irving (34) fue el más acertado de los locales. Los Cavaliers, perdedores de este duelo, tendrán una oportunidad más ser los octavos y seguir jugando: se medirán al ganador del Hawks-Hornets.
Conscientes de lo que les viene por delante, los Nets emplearon algunas de sus mejores herramientas para apretar los tornillos adecuados. Y desde bien pronto, por eso controlaron el partido desde la salida y hasta que el último bocinazo tuvo lugar. Con ello se van a los playoffs para enfrentarse en la primera ronda a los Celtics. Los de Boston esperan a su nuevo rival después de cerrar una hermosa fase regular en la que fueron de menos a más y a la espera de tener en el Garden una vez más a Kyrie Irving, su ex, un jugador que se crece en la adversidad y que de ese pabellón no guarda muchos recuerdos que sean agradables.
En unos Cavs golpeados durante toda la campaña por las malditas lesiones no iba a faltar que en el primer partido clave de verdad les faltara uno de los importantes. Además de Dean Wade, que no jugará mas en lo que queda, y de Collin Sexton, baja desde principios de curso, los de Ohio afrontaron este reto sin Jarrett Allen, precisamente también un ex del otro equipo y uno de los representantes de su franquicia en el All-Star de este año. Sin un pívot que está marcando tantas diferencias se hacía complicado. Y comenzar con veinte puntos de desventaja, un 40-20 en el primer acto, era una de las primeras señales de que ésa no iba a ser la noche de los de Bickerstaff. La protección del aro estuvo en lo bajo durante ese primer cuarto matador en el que los Nets metían de todos los colores, ya fuera buscando al hombre alto con pases interiores, sacando de los bloqueos a Durant para que lanzara en buena posición, yendo a la contra, en penetraciones simples, con tiros en los que el atacante estaba bien solo y, para rematar, con un tiro de Nic Claxton sobre la bocina a seis metros del aro, que para nada es su rango.
La solidez en ataque de los Nets fue especial. Es lo que se le pide de partida a una plantilla de tanta calidad. El mejor ejemplo estuvo en Irving, que metió sus doce primeros lanzamientos en juego y no falló hasta el último cuarto para acabar, en total, con 12/15 en tiros de campo. A su rival simplemente le faltaban efectivos. Vimos varios aportes en los dos lados tanto de Evan Mobley como de Kevin Love, uno más dentro y otro más fuera, y Garland fue la constante. Pero, además de tener a Caris LeVert más desacertado que de costumbre, no les daba para más. Y lo pelearon hasta el final, se les pueden achacar pocas cosas. Después de verse tan abajo en el marcador fueron, tacita a tacita, poniendo más puntos de su parte que de la del contrincante. Durante el último cuarto llegaron a ponerse a cinco de distancia, si bien es cierto que sólo ocurrió en los dos minutos finales y con los Nets controlando gracias a las faltas que forzaban. Porque no les daba para más.