Damian Lillard explota en contra del nuevo arbitraje

Damian Lillard anotó 27 puntos en la derrota ante los Clippers el martes por la noche, y lanzó un solo tiro libre. Está promediando 3,2 intentos desde la línea de personal por partido en la temporada, cuatro menos por noche que los 7,2 que lanzaba la temporada pasada. Ha sido parte de una caída general en su juego ofensivo.

Tras el partido, arremetió frustrado contra la forma en que se está pitando el juego. "Siento que la forma en que se está oficiando el juego es inaceptable. No quiero profundizar demasiado en ello para que hagan un gran problema, pero las explicaciones, las m*** que se están perdiendo, quiero decir, vamos. Sentí que al entrar, el cambio de reglas no me afectaría, porque no hago el truco de los árbitros, no hago las jugadas de truco, y es simplemente inaceptable. Luego las explicaciones y los comentarios a cambio cuando se lo dices es como… Ni siquiera tengo nada más que decir al respecto”, dijo Lillard, que tendrá que pagar una multa a la liga por ello.

Esta temporada, la NBA ordenó a los árbitros que dejaran de pitar faltas en movimientos no relacionados con el baloncesto, como los jugadores que saltan de forma antinatural hacia los defensores para sacar una falta, o que sacan las piernas para hacer contacto con un defensor que está en posición legal. Sin embargo, algunos jugadores tienen la sensación de que, con ello, los árbitros están permitiendo un nuevo nivel de contacto por parte de los defensores. No son sólo los movimientos no relacionados con el baloncesto los que no se pitan, sino también las faltas reales. James Harden ha sido el más crítico con el nuevo estilo de arbitraje, y cuando le pitaron una falta el lunes por la noche, provocó vítores sarcásticos por su parte y la de sus compañeros.

El bajón de tiro de Lillard en el inicio de la temporada va más allá del arbitraje. Está tirando un 25,5% en tiros de 3 puntos esta temporada y está luchando en particular con los triples de más de siete metros por los que Lillard ha sido conocido en el pasado. Damian está llegando al aro un poco más que la temporada pasada, pero está terminando sólo el 52,8% de sus tiros en la zona, por debajo del 63,1% de hace una temporada. Todo ello ha llevado a la liga a especular con la posibilidad de que la lesión abdominal que frenó a Lillard en los Juegos Olímpicos no esté totalmente curada.

A pesar de ello, Portland sigue teniendo un ataque entre los 10 mejores de la NBA esta temporada, pero ha empezado con un 5-6. También hay una nube que se cierne sobre la franquicia desde la investigación del gerente general Neil Olshey y el ambiente de trabajo que éste creó en Portland.