Kyrie Irving desvela su estrategia: luchar contra el control social
Después de que los Nets le hayan dejado fuera de la planificación por no vacunarse, Kyrie Irving ha filtrado la que sería su razón para no hacerlo.
Kyrie Irving ha sido apartado en los Nets de toda acción relacionada con el baloncesto y el jugador se encuentra con el balón en su tejado. Puede entrenar en las instalaciones de los Nets por el mismo mandato que no puede jugar en el pabellón, lo que hizo a la franquicia mover ficha esta semana y señalar al base como inactivo hasta que sea un participante a pleno rendimiento.
Kyrie Irving ha optado por no vacunarse como método de protección contra el coronavirus y Nueva York sigue una legislación estricta respecto a los espectáculos públicos, en los que se incluyen los partidos de la NBA de Knicks y Nets como locales, por lo que no está disponible. Se ve acorralado y ha decidido filtrar a la prensa una postura con la que anhela justificarse.
The Athletic, con la firma del periodista Shams Charania, pone sobre la mesa la opinión de Kyrie Irving, que mantiene su pensamiento de no ponerse la vacuna, aunque no hable por su boca. Según la información recogida, el jugador no está en contra de la vacuna desde una visión científica y sí que lo está de la imposición de ésta en la sociedad. Se expresa que, para Irving, ésta es una lucha que va más allá del terreno de juego y que, siendo "la voz de los sin voz", puede ayudar a cambiar la percepción social de este problema. Según expresan fuentes cercanas al de los Nets, su negativa se centra en el cabreo por cómo la imposición de la vacunación en algunos trabajos menos remunerados que el suyo lleva a problemas sociales como la pérdida de empleo. Entiende esta posición como "un reto contra el control de la sociedad" por parte de las autoridades.
Irving se ha mostrado, en el pasado, muy implicado en las causas sociales. Por ejemplo, poniendo en valor a las mujeres de la WNBA o participando activamente en la lucha por la desigualdad racial que explotó el año pasado en Estados Unidos con el caso de George Floyd. Esta vez, sin embargo, está en juego su propio trabajo aunque haya intentado explicar con detenimiento a algunos de sus compañeros la arriesgada postura que, supuestamente, ha adoptado. Sus contratos, no sólo el de los Nets, están en riesgo en un equipo que además tiene el aliciente de estar en una buena situación para ir a por el título esta temporada.
En las declaraciones de Steve Nash de esta semana se podía entrever otra estrategia: la de la presión a las autoridades sanitarias para que levanten la mano con la NBA, es decir, con los Nets e Irving, para hacer posible que el jugador dispute partidos como local en el Barclays Center sin ser vacunado y, por lo tanto, pueda hacer vida como jugador a tiempo completo. Los Nets han endurecido la postura, pero no se debe descartar esta segunda vía, la de la presión, para intentar que Kyrie, caracterizado por una enorme tozudez en este tipo de cuestiones extradeportivas, se salga con la suya. Otros jugadores, como Andrew Wiggins, han tenido que pasar por el aro y ponerse la inyección sin creer en ella como razón para prevenir la enfermedad, pero parece, por lo filtrado por el entorno, que Kyrie busca horizontes más allá de los mundanos.
Lo que sí ha dicho Kyrie Irving
Después de lo anteriormente vertido sobre la opinión pública, y visto que el convencimiento no era enorme, el jugador se expresó por sí mismo. Lo hizo a través de Instagram en un vídeo en directo en el que se refirió a toda la polémica que, por su decisión contra lo establecido por salud, él mismo ha generado.
"Voy a seguir en forma, listo para jugar, listo para ser parte de todo esto. Esto no es una cuestión política. No se trata de la NBA ni de cualquier organización, se trata de mi vida y de lo que elijo hacer"
"Las consecuencias financieras las sé. ¿Creéis que quiero perder dinero, que realmente quiero renunciar a mi sueño de perseguir el título, que realmente sólo quiero dejar mi puesto de trabajo? Sentarme en casa y no ir a por cosas junto mis compañeros de equipo, con los que he podido crecer, aprender... ¿Creéis que quiero renunciar a mi salario por mandato porque no estoy vacunado? Vamos..."
"Es una realidad que para estar en la ciudad de Nueva York, para estar en un equipo de ella, tengo que estar vacunado. Elegí no vacunarme y ésa es mi elección. Os pediría a todos que sólo lo respetéis"
"Ésta es mi vida. Puedo hacer lo que quiera con mi cuerpo, pero me estáis diciendo lo que hacer con mi cuerpo. Bueno, eso tiene mucho que ver con lo que está sucediendo en este mundo. Ahora mismo estoy dentro de algo que es más grande que el baloncesto. Me mantengo en lo que creo, tan simple como eso. No se trata de ser antivacunas o de estar de un lado o del otro, se trata de ser realmente fiel a lo que me hace sentir bien. Si me vais a demonizar por tener más preguntas y tomarme más tiempo para decidir sobre mi vida, pues... Nadie va a callar mi voz. Sé las consecuencias de las decisiones que tomo con mi vida, no estoy aquí para endulzarlas, pero todavía quedan muchas por tomar: no me voy a retirar"
Si bien reiteró que no se va a retirar, como se había planteado en los círculos cercanos a los Nets fuera traspasado o apartado, también se habla de la retirada de la oferta máxima de renovación a la que tiene acceso Irving próximamente, unos 187 millones por 4 años, que la franquicia retira hasta que se aclare este tema.