El sainete de cada verano en la NBA ha aterrizado en esta ocasión en Philadelphia bajo el nombre de Ben Simmons, un jugador llamado a cambiar el destino de la franquicia junto a Joel Embiid y que está más fuera que dentro cinco años después de ser uno del draft y cuatro desde que hizo su debut oficial en la Liga.

Porque Simmons iba para estrella. Base grande, de visión y movimientos rápidos, es un ciclón cuando entra a canasta. Es casi imparable por tamaño (211 centímetros) y por inteligencia. Cualidades que mostró desde su primer partido en la NBA y que ha continuidad en sus siguientes 308 con los Sixers. El problema, que eso ha sido todo. Más de 300 encuentros entre temporada regular y playoffs, más veranos de preparación, sin dar un paso adelante. No ha evolucionado desde el perímetro (solo 34 intentos en cuatro años, 5 aciertos). Ni tampoco desde la personal: su porcentaje ha subido del 56% de su año de novato a solo el 61,3% la pasada temporada. Y en los últimos playoffs, el infierno: 34,2%.

Un escenario aterrador para un jugador de tan solo 25 años, que firmó un contrato por 177 millones de dólares en cinco años en julio de 2019 y que empezó a cobrar el pasado curso, y que se siente agraviado por todos los rumores e informaciones que le enseñan la puerta de salida de Philadelphia. Y él ha recogido el guante: no volverá a vestir la camiseta de los Sixers. No se presentará al campus de preparación de la temporada y se enfrentará a multas que van desde 227.000 euros por faltar a cada entrenamiento hasta un total de 1,3 millones si no se presenta a ninguno y causa baja también en la pretemporada.

Amenazas y castigo que cinco franquicias de la NBA podrían aprovechar para hacerse con Simmons, según USA Today. El medio americano ha utilizado la famosa (y divertida) maquina de traspasos de la ESPN (trade machine) para ver dónde podría acabar el australiano.

Portland Trail Blazers

Portland es un fijo en los playoffs desde ocho años por obra y gracia de Terry Stotts y Damian Lillard. Pero el paso siguiente, el de las Finales de la NBA, se resiste y el proyecto empieza a dar síntomas de agotamiento. Stotts salió del banquillo por Billups y Lillard está a un paso de la rebelión y, por ello, un cambio no sería del todo malo. Según la trade machine, los Blazers debería dar a CJ McCollum (un sacrilegio), a Anfernee Simons y dos futuras primeras rondas por Simmons.

Indiana Pacers

Indiana está de transformación tras la llegada al banquillo de Rick Carlisle en sustitución de Nate Bjorkgren y con ganas de superar una primera ronda de los playoffs que se le ha resistido durante cinco años seguidos (el pasado curso no se clasificó para las rondas finales). Y qué mejor para conseguirlo que un base de la calidad de Simmons, que acompañe a Caris LeVert en un interesante backcourt. Los Pacers deberían desprenderse de Malcolm Brogdon, TJ Warren, Chris Duarte y una selección de primera ronda fuertemente protegida.

Sacramento Kings

Ay, Sacramento. Son 15 años consecutivos sin clasificarse para los playoffs con muchas (muchas, muchísimas) rondas del draft desperdiciadas, entrenadores quemados y operaciones sin redito. ¿Qué importa una más? Al final, todo es prueba y error… y peor no van a estar. Los Kings deberían dar a los Sixers a Buddy Hield y Troy Haliburton. Tampoco es mucho.

Toronto Raptors

Toronto busca de nuevo su camino. Sin Kyle Lowry ni Marc Gasol ni Serge Ibaka, héroes del primer anillo de su historia, conquistado en 2019, los Raptors tratan de ponerse de nuevo el traje de campeón y traer a Ben Simmons les permitiría dar varios pasos hacia adelante. La franquicia de Canadá debería mandar a los Sixers a Goran Dragic, OG Anunoby y Chris Boucher junto con una selección protegida de primera ronda.

Golden State Warriors

Los Warriors siempre han estado en el grupito de equipos que más se interesaban por Simmons. Con Klay Thompson a días de recuperarse completamente, Golden State podría aumentar su capacidad defensiva y ofensiva con un jugador de la talla de Simmons. El base no les daría lanzamiento exterior, pero si velocidad de conducción y penetración que permitiría liberar a sus tiradores. La franquicia de San Francisco tendría que introducir en la operación a Andrew Wiggins, James Wiseman and Moses Moody con una futura primera ronda.