A Usman Garuba le está costando dar sus primeros pasos con la camiseta de Houston Rockets. Antes del partido, ya lo dejaba claro. En la sesión de fotos de los rookies, Jaleen Green, Alperen Sengun y Josh Christopher, sus compañeros de camada en el equipo, posaban con gestos de todo tipo. Él, en cambio, se limitaba a una mirada fija para la cámara. Sin estridencias. Su única preocupación está sobre la pista y, ahí, ya va creciendo. En su segundo partido de Summer League, todo fluyó mucho mejor que en el primero. Sin sentirse aún cómodo del todo, los números mejoraron y las sensaciones generales, también. 4 puntos, 8 rebotes, 2 asistencias y 1 tapón para registrar una carta más completa que en su debut, en el que se quedó sin poder anotar (6 rebotes). Su equipo, sin embargo, no pudo llevarse la victoria frente a Orlando Magic, que se impuso por 89 puntos a 76 en un buen partido de Franz Wagner (13+3), otro de los grandes talentos internacionales de la generación, junto al propio Usman.

De nuevo, el exjugador del Real Madrid se mostró poderoso en el juego interior. Fue el tercer jugador de los Rockets en cuanto a rebotes capturados y, además, con muchos menos minutos sobre la pista que sus compañeros. Sengun, que está demostrando por qué fue MVP de la liga turca, firmó un dobe-doble (13+10) y Tremont Waters, en 31 minutos, le superó por uno. Garuba pudo participar durante 16, incrementando sus 12 minutos del debut. Entonces, el de Azuqueca de Henares aceptó que no se había adaptado bien. Hoy, las palabras han sido de Will Weaver, técnico asistente, que no ha dudado en ensalzar a su nuevo jugador: "Longitud, generosidad, físico, todas las jugadas que puede hacer en el rebote... Cuando los cuerpos chocan, generalmente, él sigue en pie", ha declarado.

En el partido, Garuba empezó lanzado, con un tapón imponente a Asbjorn Midtgaard. A partir de ahí, comenzó a crecer bajo el aro, tanto en defensa como en ataque. Sus primeros puntos con la camiseta de los Rockets, de hecho, llegaron después de hacerse con un rebote ofensivo tras tiro de Christopher. Los siguientes, de igual forma, también los obtendría en la pintura, apoyándose en el tablero. Esta vez, tras ganarse la posición con un bote y estirando su cuerpo en dirección a canasta. Marca de la casa.

En general, buenas noticias para el interior español, que empieza a dibujar una línea de crecimiento positiva. Algo muy importante, aún más en una franquicia como la texana, de cuyos rookies va a beber mucho a lo largo del curso. Sin ir más lejos, Garuba está llamado a tener un papel protagonista en el equipo. O, como mínimo, a poder ganárselo. En el interior, cuentan con Daniel Theis, el propio Sengun y Christian Wood, que roza el nivel de All Star. Con ellos deberá compartir protagonismo en una organización que busca potenciar su talento joven, encabezado por Jalen Green, número dos del Draft y una de las sensaciones en la competición veraniega, en la que no volverá a participar por lesión. Como Santi Aldama, Garuba va a más en el continente americano y, ahora, tendrá en mente seguir la estela de su compatriota, que, también tras un inicio dubitativo, ya ha firmado un doble-doble en su tercer partido con Memphis Grizzlies.