Revolución en el Granca: llega Kilpatrick y se marcha Wiley

Tras anunciar el mismo fin de semana la rescisión de contrato de Frankie Ferrari, ya en las filas del Unicaja de Málaga, el Herbalife Gran Canaria continúa con el profundo lavado de cara de su plantilla.

Si hace unas semanas, durante las ventanas FIBA, ya se incorporó AJ Slaughter, que tendrá trabajo extra como base tras la salida del propio Ferrari, el Granca hizo oficial este mediodía la llegada del escolta norteamericano Sean Kilpatrick con un contrato hasta el final de la presente temporada.

Kilpatrick acumula 150 partidos en la NBA tras pasar por Minnesota, Brooklyn Nets, Milwaukee Bucks, Los Ángeles Clippers y Chicago Bulls. En 2019 se vino a Europa para jugar en el Panathinaikos, Buducnost y Tofas Bursa, su último equipo hasta hace escasas fechas. En Turquía, destino previo a Gran Canaria, estaba promediando 18,4 puntos, 4 rebotes y 3,3 asistencias en 32 minutos por partido. Se espera que pueda debutar este sábado ante el Acunsa GBC.

Igualmente, el Herbalife anuncia la suspensión temporal de contrato de Jacob Wiley, que se mantenía encerrado en un hotel de Estonia tras haber contraído la COVID-19 en una convocatoria con la selección de Macedonia del Norte, país del que había obtenido un pasaporte que dependía de su debut en las pasadas ventanas de la FIBA. Esta “suspensión” se produce en medio de las negociaciones para buscarle una salida al pívot norteamericano, ofrecido como moneda de cambio en varias negociaciones. De momento se marcha a Estados Unidos para, según la versión oficial del club, recuperarse de las secuelas del virus en su país. Al menos según la propia entidad, en absoluto se descarta su regreso. La realidad bien pudiera ser otra.