Booker amplía la racha y el sueño es cada vez más real
El base firmó 35 puntos, 17 de ellos en el tercer cuarto, y lideró la sexta victoria de los Suns, que siguen invictos. Consiguen ganar 6 partidos consecutivos por primera vez desde 2014.
Un sueño casi irrealizable. Los Suns se presentaban a la burbuja con la difícil, o imposible, misión de ganar un número elevado de los 8 partidos que tenían que hacer frente los de Monty Williams y esperar resultados. Tras la disputa de 6 de ellos, el milagro es cada vez más real. 6 de 6 y a medio partido de los Blazers, a medio partido del play-in. Los de Arizona han sabido pescar en río revuelto y aprovechar la nefasta andadura hasta el momento de Grizzlies o Pelicans, así como la irregular trayectoria de otros candidatos como Spurs o Blazers.
La sexta piedra en el camino de los Suns eran unos Oklahoma City Thunder, que se presentaban al partido sin 4 de los 5 habituales titulares antes de la suspensión de la competición, Schröder fuera de la burbuja por motivos personales, y con el billete a los playoffs sacado desde hace tiempo. Pese a que Chris Paul, era el único primer espada que presentaba de inicio Donovan, a los Suns les costó entrar en el partido. Una falta de intesidad defensiva alarmante, en gran parte por la sensible pérdida de inicio de Ayton, el gran acierto de jugadores como Bazley o Muscala, la acertada dirección de juego de Paul o al desacierto exterior de los de Williams, fueron algunos de los factores que pusieron contra las cuerdas a unos Suns, que acabaron el primer cuarto a 14 puntos en el marcador.
La reacción no se hizo esperar y un segundo y tercer cuarto soberbios permitió a los Suns dar descanso en los últimos 12 minutos a su primera unidad de cara al siguiente partido, que disputarán este martes ante unos Sixers que tienen en la enfermería a sus dos grandes estandartes como son Embiid y Simmons. El segundo cuarto fue el de la aparición de Ayton. La polémica por saltarse los tests del coronavirus quedó atrás y el pívot nacido en Bahamas salió a comerse a los Thunder en la pintura, los cuales acusaron sobremanera la ausencia de Adams. El pívot apenas tardó 50 segundos en hacerse notar capturando el primer rebote en defensa, tras una intensa defensa.
La conexión con Ricky, sumado a la aparición de Johnson o Carter desde fuera y un Booker que empezaba a mirar el aro más allá desde la línea de personal, acercaron a unos Suns que no terminaban de adelantarse en el marcador por las apariciones fugaces desde el exterior de Bazley, que cogió los mandos después de que Donovan mandase a Paul al banquillo. Ayton y Booker lideraron en el último 1:30 de la primera parte el último parcial que abriría las puertas de la delantera en el marcador a los Suns. 5-0 y uno arriba al descanso.
Un marcador tremendamente ajustado que hacía presagiar que en la segunda parte los Suns deberían de demostrar su poderío físico y la falta de minutos en el grueso del roster de Donovan para sumar el sexto triunfo consecutivo. Un inicio aplastante, pasando de 1 a 12 puntos de ventaja en el marcador en menos de 4 minutos de juego, cambió los planes de los de Oklahoma que terminaron entregando el partido demasiado pronto.
Resurgió Ricky, que acabó con 7 puntos, 5 rebotes y 9 asistencias, aportando frescura e inteligencia a la dirección de juego de los de Williams, pero sin lugar a dudas, el nombre del tercer cuarto fue Devin Booker. 17 puntos, para terminar el partido con 35 y adquiriendo la licencia de ver el último cuarto desde el banquillo. El base de Michigan acabó el partido con un porcentaje superior del 50% en tiros de campo y demostró una enorme capacidad anotadora desde la línea exterior, con triples memorables, y desde la de personal, anotando los 14 tiros que lanzó.
Más allá del acierto ofensivo de los Suns, los Thunder se quedaron en el tercer cuarto en 17 puntos, demostrando una enorme pobreza ofensiva sin la dirección de Chris Paul y su necesidad imperiosa de que los de dentro le generen pick & rolls. Esa falta de ideas. la propició también una intensidad defensiva del equipo de Arizona que dejó a los Thunder en 1 de 13 en tiros de campo y en 3 de 11 desde fuera, números escalofriantemente bajos.
El tercer cuarto acabó con 17 puntos de ventaja para los Suns y la falta de intereses deportivos en los de Donovan y la premura del siguiente partido para los Suns, propició que ambos entrenadores dieran oportunidades a los menos habituales. Nombres como Lecque o Diallo en los Suns o Hervey en los Thunder tuvieron la oportunidad de mostrarse en un cuarto que terminó por convertirse en un duelo de triplista, protagonizado por Bridges en los Suns y por Nader y Bazley en los Thunder.
Con este triunfo, los Suns adelantan a los Spurs y se ponen a medio partido de los Blazers y a uno de los Grizzlies. La lucha por el octavo y noveno en el Oeste ha quedado entre ellos tres y unos Spurs, que quedan ahora empatados con los Suns pero con peor porcentaje. Los Sixers, en apenas 24 horas, será el próximo rival a superar por Booker, Ricky, Ayton y compañía. Los de Philadelphia, sin nada en juego y con la sexta plaza del Este asegurada, no debería de ser un examen difícil de superar, más si cabe con las ausencias de Simmons y Embiid. 10 años después el sueño de los playoffs está cada vez más cerca para los Suns.
Ese partido será a las 22:30, antes saltarán a cancha los Spurs (20:00) para medirse a los Rockets. Mientras que media hora más tarde que los Suns, los Grizzlies se medirán a los Celtics. El martes decisivo en el Oeste se completará de madrugada (00:30) con el duelo entre Mavericks y Blazers. Por su parte, los Thunder, tendrán de descanso hasta la madrugada del miércoles al jueves, cuando se medirán a los Heat, en un nuevo partido propicio para las rotaciones y tratar de reservar a los primeros espadas para la disputa de los playoffs, que arrancarán el próximo lunes.