Doc Rivers: "Los rookies se están pasando la pandemia en Tinder"
"Tienen esas Apps pero yo les digo que ahí solo se habla" dice el técnico, que defiende a Isiah Thomas y habla del regreso: "Estoy preocupado porque hay que estarlo".
El pasado viernes ya hubo franquicias (según las normativas de cada estado) que pudieron echar a andar pero solo tres dispusieron ya entrenamientos individuales para sus jugadores (Cavaliers, Nuggets y Blazers). El resto están a la espera, entre ellos los dos equipos de L.A. Lakers y Clippers, los dos grandes favoritos al anillo junto a los Bucks cuando se paró la competición, quieren ponerse en marcha el día 16. Además podrán hacer test también a los jugadores y personal asintomático ya que en Los Ángeles, el alcalde aseguró que toda la población tenía acceso a las pruebas. Donde no es así o al menos donde no hay test suficientes para los trabajadores sanitarios, la NBA no quiere que los equipos los realicen de forma masiva para evitar que se vea con malos ojos por parte de la población.
Doc Rivers, el técnico de los Clippers, pasó por el podcast de David Aldridge y Wos Lambre ("Hoops, Adjacent") y habó sin tapujos de esa vuelta a un mínimo atisbo de normalidad en plena crisis del coronavirus: "Estoy preocupado porque hay que estarlo. No soy lo suficientemente listo para saber qué es o qué hace este virus. Sé que ataca si estás en grupo y no lo hace si estás solo... tengo 58 años. No soy joven, pero creo que sí lo suficiente... no sé. ¿Diría que puedo empezar a trabajar sin miedo? Por supuesto que no. Tienes que tener miedo en una situación así... hasta que haya una vacuna nadie podrá decir que va a hacer algo y se va a sentir totalmente cómodo haciéndolo".
Cuando los Clippers vuelvan al trabajo, no estará su más preciado asistente, Armond Hill, que tiene 67 años: "Está enfadado, quiere trabajar. Y yo le digo que lo entiendo pero que no le vamos a dejar. No podemos. Yo no puedo vivir con ese peso". Los Clippers (44-20) han tratado de mantener la forma física y la unión de grupo durante este tiempo de confinamiento: "Ha habido una gran comunicación. Usámos el Zoom ese... tenemos a un famoso en Zoom cada semana, no quiero revelar nombres pero hemos tenido a gente increíble hablando con el equipo. Kawhi ha estado pendiente de todo el mundo. Esta siendo muy comunicativo, él y Paul George han hecho un gran trabajo a la hora de estar pendiente de los demás, hacer que todo el mundo trabaje...".
Los Clippers compraron a cada jugador bicicletas estáticas, cintas de correr y pesas, y fijaron un lema "win the wait" (gana la espera) para mantener la unidad y la motivación. Rivers aseguró que no solo se han preocupado del físico sino también del estado anímico de los jugadores: "Hay un jugador que ha estado en una habitación de hotel porque acababa de ser traspasado y todavía no tenía casa. Tenemos tres o cuatro rookies viviendo solos en apartamentos. Dos de ellos acababan de romper con sus novias cuando irrumpió la pandemia. Así que están totalmente solos. Creo que están todo el día en Tinder y esas Apps... pero como yo les digo 'ahí solo se habla, hermano, solo se habla'. Es duro para esos chicos. No saben cocinar normalmente, tienen que enfrentarse a todo solos. Intentamos tener comunicación fluida con ellos, saber cómo se encuentran".
Si se vuelve a jugar, los Clippers retomarán la batalla de Los Ángeles con los Lakers, que mandaban en el Oeste y acababan de ganar el tercer duelo local de la temporada después de que los de Rivers se impusieran en la noche inaugural y la jornada de Navidad: "Tal y como yo lo veo, ellos están en nuestro camino. No lo veo como una batalla por Los Ángeles porque no nos darán un trofeo solo por ganar a los Lakers. No: para ganar el trofeo tenemos que ganar antes a los Lakers. Ellos están en el camino de la lucha por ese trofeo. Como equipo, estamos tranquilos con eso. Y creo que sería una buena pelea. Pero es que en el Oeste hay muchos buenos equipos a los que tendríamos que ganar también antes".
Rivers (jugó en los Hawks entre 1983 y 1991 y fue all star en 1988) también opinó sobre el gran tema de moda, el documental The Last Dance sobre Michael Jordan. Y rompió una lanza en favor de Isiah Thomas, base de los Pistons y uno de los rivales más encarnizados del 23 de los Bulls: "Detesto la forma en la que se define a Isiah en el documental. Era un ganador duro y se comportaba como todos los jugadores con esa mentalidad. Es de Chicago, como yo, y creo que es el mejor jugador de baloncesto que han dado las calles de Chicago. Que luego Jordan jugara precisamente en Chicago creó una rivalidad extra entre ellos. Michael quería hacerse con Chicago, Isiah no quería dárselo... la gente no ve eso, solo los duelos con los Pistons. Pero eso era fundamental. Isiah jugaba en los Pistons pero seguía viviendo en Chicago. Y no quería llegar a Chicago y que solo se hablara de Jordan, así que había mucha tensión ahí".