Los Pistons de finales de los 80 y principios de los 90, esos Bad Boys ganadores de dos anillos y que eliminaron tres temporadas seguidas los Bulls de Jordan, fueron uno de los grandes protagonistas del tercer y el cuarto capítulo de The Last Dance y también uno de loss equipos más icónicos de la historia reciente de la Liga. Y por encima de todos estaba su mejor jugador, Isiah Thomas, uno de los mejores bases de la historia y uno de los mayores rivales que tuvo His Airness, tanto dentro como fuera de la pista. Hasta el punto de que la relación entre ambos, tres décadas después, es inexistente. Y no sólo eso, sino que existe un rencor acumulado por las dos partes que queda demostrado cada vez que hablan el uno del otro.

Eso sí, el antiguo jugador de los Bulls no tiene reparos en reconocer el talento de Thomas a pesar de la rivalidad. "Respeto su talento. Para mí, el mejor base de la historia es Magic Johnson, pero justo después está Isiah. No importa cuánto le odie, respeto su juego", aseguraba en declaraciones recogidas por NBC Sports. Eso sí, en las mismas aseguraba que haberle llevado al Dream Team habría afectado a la química grupal de aquel equipo, y a la "camaradería" que representaban.

La rivalidad entre Michael Jordan e Isiah Thomas no parece que vaya a ver su final en un futuro próximo, pero eso no quita que ambos se puedan reconocer como grandes jugadores, a pesar de que la ausencia del base del Dream Team siempre vaya a ser objeto de polémica: "Cuando hicieron la selección para el Dream Team y no estaba incluido hubo mucha controversia. Todavía no sé quién fue el responsable o por qué pensaron que no debían contar conmigo. Conozco los criterios que había para la selección del equipo y los cumplía todos. Es la mayor mancha en mi currículum", aseguró Thomas respecto a una no convocatoria que despertó (y despierta) mucha polémica y cuyos motivos siguen sin estar claros del todo.