Comunicación diaria con los médicos, nada de movimientos... la NBA reacciona al coronavirus

La NBA ha anunciado un paquete de medidas para luchar contra el coronavirus y evitar su propagación. Recordemos que el positivo de Rudy Gobert provocó la suspensión de la competición estadounidense, que se enfrenta a un escenario inédito en su historia paliar los daños que este virus, que tuvo su brote en la ciudad china de Wuhan, pueda causar. Por eso, y como medida de prevención, se han dado una serie de medidas a los jugadores que tendrán como objetivo reducir todo lo posible los daños.

Para evitar posibles contagios, la Liga ha aconsejado que se tomen una serie de medidas relativamente exigentes que se mantendrán en vigor hasta el lunes, cuando, tal y como ha informado Shams Charania, donde se ha "alentado" a cada equipo a realizar reuniones educativas entre los jugadores y el personal con los médicos para discutir la situación del coronavirus. La reunión, que se hará en persona o de forma remota, podrá extender las prevenciones ya dadas o hacerlas todavía más restrictivas.

Dentro de estas medidas, se ha incluido que cada jugador se quede dentro de los límites de su franquicia y su mercado. Es decir, que no salga fuera de las jurisdicciones de un equipo determinado ni viaje a otras ciudades. También se les ha pedido que permanezcan en casa el mayor tiempo posible y solo salir para lo estrictamente necesario. Además, se suspenden y prácticas grupales y los médicos del equipo hablarán individualmente con cada jugador de forma diaria.

Recordemos que la NBA estará parada un mínimo de 30 días, una estimación mínima que probablemente se extenderá, y que estas medidas son muy parecidas a las que ya se están tomando en Europa en estos momentos. Enfrentarse al coronavirus supone un nuevo capítulo en un año aciago para la competición norteamericana, que empezó la temporada con conflictos con China, ha sufrido las muertes de David Stern y Kobe Bryant y tiene ahora que suspender su actividad de forma total y cuando solo quedaban un mes para los playoffs, algo que ocurre por primera vez en la historia.