Épico: los Heat ganan a los Sixers en un final de partido increíble

Uno de los partidos de la temporada, sin duda, y una de las muchas batallas que están librando y van a librar los seis principales del Este (Bucks, Heat, Celtics, Raptors, Sixers, Pacers), se saldó con triunfo (117-116) sobre la bocina de la prórroga de los Heat ante los Sixers, 2-1 ya en el duelo directo de la temporada, un punto caliente desde la salida de Jimmy Butler con destino Florida. Cosas increíbles: en back to back, los Heat han ganado dos partidos por un punto (el anterior, 113-112 a los Pacers) y los Sixers han cedido dos también por la mínima, algo que no le pasaba en duelos consecutivos desde hacía casi 25 años (enero de 1995). Más cosas increíbles: los Heat (24-8) son segundos del Este con el mejor balance en duelos de la Conferencia. Están 15-1 en su pista, donde solo han ganado los Lakers, 6-0 en partidos resueltos en la prórroga y 8-1 en los que se deciden por cinco puntos o menos. Sólidos como una roca, son una amenaza seria de cara a los playoffs y pueden sembrar el pánico si llega un refuerzo de primer nivel en el mercado invernal... Los Sixers, acostumbrados a los altibajos, han enlazado dos derrotas en Florida tras su exhibición del día de Navidad contra los todopoderosos Bucks.

El partido, una colisión tremenda, tuvo una resolución increíble. Los Sixers remontaron en el último cuarto y ganaba por cinco (101-106) a 1:14 del final. Pero regalaron rebotes en su canasta y a Embiid le robó la cartera un par de veces Jimmy Butler, su compañero la temporada pasada. Con 104-106, el escolta sacó el balón de las manos del pívot camerunés y Tyler Herro, que se encontró con la posesión, cruzó la pista y anotó un triple tremendo (un rookie con sangre de killer: 107-106). Tras otro error de Embiid, Butler solo metió un tiro libre (108-106) y Josh Richardson (ex de los Heat) tuvo tiros libres a falta de un segundo y tras challenge no concedido a Spoelstra. El drama supremo: falló el primero y tiró a fallar el segundo, que lamió el aro y cayó en las mano de un Ben Simmons que lo cogió en el aire y empató el partido en escorzo. Increíble. En la prórroga, siguió la igualdad (116-116 a 18 segundos del final) antes de que Butler volviera (por tercera vez en los momentos calientes) a fallar uno de sus dos tiros libres (117-116) y Tobias Harris enviara al limbo un buen triple que hubiera dado un triunfo colosal a los Sixers. Pero el partido se quedó en Miami, donde es casi, casi imposible ganar a unos Heat que parecen comer clavos. Nada les quiebra.

Butler acabó con 25 puntos, 9 rebotes y 9 asistencias, Duncan Robinson con 16 puntos sin fallo (4/4 en triples), Herro con 16 y 4/8 desde la línea de tres, Dragic con 19 y 7 asistencias... En los Sixers, 35 puntos y 11 rebotes de Embiid, 17 puntos de Richardson, 15 y 11 asistencias de Simmons y otra derrota, ya 12 (23-12) que les dejan a seis partidos y medio de los Bucks y quintos de un Este donde va a haber mucha, mucha pelea en la zona alta. Este partido fue una extraordinaria prueba de ello.