Resumen y resultado del Real Madrid-Alba: Euroliga (85-71): el Madrid sacude sus fantasmas
El Madrid se reencuentra con la victoria tras sus tres derrotas seguidas en Europa. Tavares, MVP, fue decisivo en la recta final. Garuba, de nuevo brillante.
Importante victoria la que suma el Real Madrid en la sexta jornada de Euroliga ante un Alba de Berlín (85-71) que peleó hasta el final del tercer cuarto. A partir de entonces, los blancos controlaron el juego con Walter Tavares como rey de la zona. El de Cabo Verde, a pesar de no tener el inicio de temporada deseado, fue el mejor con 11 puntos y 8 rebotes para 20 de valoración. También destacaron jugadores como Randolph, Llull y el canterano Garuba, con 12 puntos cada uno. Gran nivel de Campazzo en la dirección de juego (8 puntos, 8 asistencias y 3 robos). De esta forma, el bloque de Pablo Laso equilibra su balance en Europa (3-3) y rompe la mala racha que acumulaba en Europa. Los fantasmas de 2005, última vez que el Madrid acumuló cuatro derrotas seguidas en Europa, se esfumaron en el Palacio.
En la vuelta a su feudo, el Madrid comenzó haciendo gala de su pegada. Y de qué manera. Primer cuarto excelso con Randolph golpeando desde el exterior y Campazzo tirando de repertorio en el juego (hasta 6 asistencias dio) para cerrar un parcial de escándalo (28-14). Pero tras eso, volvió a asomar la sombra de los últimos choques. La intensidad en defensa bajó con las rotaciones y tres pérdidas seguidas de Laprovittola dieron un empujón al Alba, que se tiraba al cuello del Madrid con Hermannsson y un Makai Mason muy efectivo, que firmó con el salto de la rana un triple inverosímil sobre la bocina del descanso para ajustar el resultado (42-38).
A la vuelta de los vestuarios el nivel visitante se mantuvo. Su estrella, Rokas Giedraitis, desaparecido en la primera parte, empezó a anotar. En ese momento apareció Causeur para contrarrestar los daños, pero Peyton Siva desde el exterior y un Johannes Thiemann muy regular fueron claves para dar la vuelta al marcador a falta de 13 minutos para el final (53-55). Entonces el Real volvió a apretar y en esos tres minutos hizo añicos la reacción germana para volver a afianzarse en el electrónico, con un triple de Llull sobre la bocina, antes del cuarto decisivo (64-56). Tras él, el Madrid controló la diferencia con Tavares imponiéndose en la zona y Garuba deleitando al Palacio con su potencia de cara al aro.