NBA | CELTICS 101 - BUCKS 113 (1-3)
Irving completa los peores tres partidos de su carrera en playoffs
El base de los Celtics atraviesa la peor racha de su carrera en playoffs. Ha metido sólo 19 de sus últimos 62 lanzamientos con 31% de acierto.
Los Celtics están contra las cuerdas en su eliminatoria con los Bucks. Una de las principales razones es la mala puntería de Kyrie Irving. El base no está siendo para nada decisivo y esta noche volvió a fallar más de lo que acertó de cara a canasta. Esta vez firmó un 7/22 en tiros con un 1/7 en triples, unos números malísimos que su equipo está notando.
"Soy jugador de baloncesto y estoy preparado. Pero es difícil cuando tratan de cortar tu ritmo en cada posesión. Te cubren por toda la cancha, hacen cosas para ponerte a prueba. Sé que las expectativas conmigo están por las nubes. Trato de utilizar esa agresividad contra mí en su contra y poner a mis compañeros en buenas situaciones mientras sigo siendo agresivo. Todas esas cosas son las que trato de hacer", explicaba Irving sobre su actuación. La cosa cambió cuando le preguntaron por su mala racha en el lanzamiento. "¿A quién le importa?"
A los aficionados de los Celtics probablemente. Irving ha metido en los tres últimos partidos (que coinciden con las tres derrotas de los de Boston en la serie) el 31% de sus lanzamientos. Un 19/62, o lo que es lo mismo, 43 tiros que no han entrado. La cantidad más alta fallada por Irving en tres partidos seguidos de playoffs. En toda la serie ante Milwaukee promedia 21,8 puntos en 20,8 lanzamientos, con un 37,7% de acierto. Por zonas, mete un 54% debajo del aro, un 36% desde la media distancia y un 24% en triples.
Parece que todos estos datos no le importan demasiado teniendo en cuenta dónde cree que estuvo el problema: "Lancé 22 tiros y debería haberlo hecho 30 veces. La constancia de atacar el aro siendo agresivos siempre nos va a situar en un buen lugar. Creo que puedo mejorar teniendo más cuidado con las pérdidas de balón. Pero en cuanto a los tiros, es algo puntual. Están defendiéndome bien, poniendo mucho énfasis sobre mí todo el tiempo".
Para redondear su mala actuación, el base se marchó al vestuario 10 segundos antes de acabar el partido, él solo, sin esperar al resto de sus compañeros. Un gesto que no sabemos cómo habrá sentado en un vestuario que desde hace meses parece no tener la mejor química posible con la estrella y líder del proyecto.