Los Spurs ya están de vacaciones. La derrota ante los Nuggets en el séptimo partido de la primera ronda ha dejado a la franquicia de Texas fuera de la fase final a las primeras de cambio, algo que ya ocurrió hace un año. A pesar de este hecho, la temporada del equipo entrenado por Gregg Popovich es digna de ser alabada: a la retirada en 2016 de Tim Duncan se juntaron las marchas de Tony Parker, Manu Ginóbili y Kawhi Leonard el verano pasado, lo que no ha impedido mantener el bloque competitivo y clasificarse un año más para los playoffs, llevando además a Denver, segundo clasificado del Oeste, al séptimo partido.

Esta habilidad para seguir compitiendo una temporada tras otra se debe en gran parte al gran trabajo de Popovich en los banquillo, que consigue sacar lo máximo de su plantilla sin importar quién se encuentre en ella. El técnico lleva clasificando a los Spurs a playoffs durante 22 años consecutivos, periodo de tiempo en el que ha llegado a conquistar 5 campeonatos, además de llegar a una Final más. 

Sin embargo, todo viaje se acaba, y el de Pop no podía ser menos. Phil Jackson, Pat Riley, Jerry Sloan, Larry Brown, Rick Adelman... una generación de entrenadores que llegaron el siglo pasado y que poco a poco va desapareciendo. Lo único que falta por saber es donde terminará la aventura de Popovich, que con 70 años de edad es el entrenador en activo que más tiempo lleva en la Liga.

El coach, que atendió a los periodistas después del duelo ante los Nuggets, no quiso aclarar este punto. "Soy entrenador jefe de la NBA. No pienso en lo que eso significa en el futuro", afirmó. Una respuesta que no sorprende. Si tenemos en cuenta su edad y el tiempo que lleva en la competición, está claro que, aunque el viaje americano no concluya durante el presente verano, está en su parte final.

A esto se le añade además el hecho de que ahora es entrenador de la selección de Estados Unidos. Con el combinado nacional debutará en competición FIBA en el Mundial de China que dará comienzo el próximo 31 de agosto, solo unos meses antes del comienzo del próximo curso baloncestístico. Si decidiese continuar, los Juegos Olímpicos del año que viene podrían marcar  un punto de inflexión y hacerle abandonar el banquillo spur. De una forma u otra, la retirada parecer estar cada vez más cercana.

Según dijo Mike Finger en Real GM, la franquicia confía en que el técnico regrese para entrenar al equipo el año que viene. Su figura es historia viva en San Antonio, y desde la directiva ya han asegurado que seguirá "hasta que él quiera". De momento, se sigue especulando con su futuro, y el entrenador no quiere aclararlo.