Récord de mates de Gobert y 59 puntos para Booker en Utah
Con el partido ganado, los Jazz apretaron para que no llegara a 60 un Booker que anotó el 64% de los puntos de su equipo (33 los demás).
Los Jazz están aprovechando el calendario distendido de su segunda parte de la temporada (todo lo contrario que la primera) y ya son quintos del Oeste (44-30) tras arrasar a los Suns (125-92), que han perdido seis de sus últimos siete partidos y marchan en 17-58.
El partido apuntaba a no tener ninguna historia, y no la tuvo en cuanto al resultado desde que un parcial de 14-0 en el segundo cuarto abrió la brecha que ya no se cerró (62-43 al descanso). Sin embargo, hubo mucha miga en un duelo en el que los Jazz anotaron más del doble que los Suns (70-32) en la pintura, gracias en parte al tope de puntos en el curso de Rudy Gobert, que acabó con 27 (y 10 rebotes) y seis mates que le dan la mejor marca de la historia en una temporada: por ahora 270, con una media de 3,7. Giannis Antetokounmpo aprieta: 262.
Además, Ricky Rubio jugó un buen partido (18 puntos y 6 asistencias con buenos porcentajes), Donovan Mitchell falló mucho (10 puntos, 14 tiros) y cumplieron como siempre Favors e Ingles. Pero la verdadera noticia estuvo en el boxscore de los Suns: 59 puntos de Devin Booker, 33 del resto del equipo. El escolta de 22 años, poco más de dos después de anotar 70, ya tiene las dos mejores marcas de jugadores de 22 o menos (Anthony Davis llegó a esos 59 también) gracias a un 19/34 en tiros, 5/8 en triples y 16/17 en tiros libres. Es, además, el tercer jugador que logra tantos puntos (junto a David Robinson y Kobe Bryant) sin que ninguno de sus compañeros anote en dobles figuras. También el primero que anota tanto para un equipo que pierde más de 30 puntos... El resto de los Suns lograron 12 canastas por las 19 suyas, firmó el 64% de puntos de un equipo en el que los demás se fueron a 15 pérdidas y 12/42 en tiros.
El partido acabó con aire circense: los Jazz apretando y haciendo faltas para que Booker no llegara a sesenta puntos. Antes, además, la grada había jaleado el regreso a la NBA del visitante Jimmer Fredette, estrella universitaria en Utah (BYU) y que, tras jugar en China, acabó con 6 puntos pero tardó mucho en dar una alegría a la afición local (1/10 en tiros), volcada con el nuevo fichaje de unos Suns que llegaron a alinear a cinco rookies en pista al mismo tiempo y que (DeAndre Ayton se quedó en 9 puntos y 7 rebotes) desde luego no tienen nivel para dar guerra a los Jazz en Salt Lake City. Pero si tienen un anotador voraz, Devin Booker, y un plan de reconstrucción que este año ha hecho aguas y que pasará examen mucho más serio el próximo.