El Real Madrid intentará dejar sentenciado su segundo objetivo en la Liga Regular de la Euroliga, su presencia en el top 4 de la clasificación y el consiguiente factor cancha en el playoff, con una victoria (18.00 horas) en su visita al Khimki Moscow ruso.

A falta de cinco jornadas para la conclusión de la primera fase de la competición, el actual campeón está con un óptimo balance de 19-6, con cuatro victorias y el averaje sobre el quinto, el Barça Lassa, por lo que lo tiene muy en su mano, al igual que, al menos, la tercera plaza, ya que le saca tres triunfos, y también el averaje, al Anadolu Efes, cuarto.

Más complicado se presenta terminar entre las dos primeras plazas que ostenta el Fenerbahce y el CSKA, pero no parece que eso pueda obsesionar a un Pablo Laso poco 'pendiente' de quien pueda ser el rival en las eliminatorias que dan el billete a la Final Four del Buesa Arena de Vitoria.

Pero si quiere aspirar a terminar lo más arriba posible, con los dos primeros clasificados a dos y una victoria respectivamente, el equipo madridista no puede fallar en, quizá, la salida más asequible que le queda de las tres ya que aún debe visitar Atenas. El Khimki está lejos del nivel del año pasado y el Real Madrid llega a Moscú con ganas de volver a rendir bien a domicilio ya que sólo fue capaz de ganar, con muchos apuros, al colista Darussafaka en sus últimos cuatro partidos fuera del WiZink Center.

Laso no podrá contar para esta cita con uno de sus pilares de esta temporada, un Anthony Randolph que se queda en Madrid por sus problemas en el tobillo, aunque su baja se compensa con la vuelta de Trey Thompkins. Además, afronta el partido con la moral alta tras su gran victoria ante el Fenerbahce (101-86), liderado por un gran Sergio Llull (17 puntos y 11 asistencias), que quiere seguir acercándose al nivel de antes de la lesión.

Por su parte, el Khimki está en una situación muy diferente y sus opciones de meterse entre los ocho primeros son remotas ya que está a tres victorias del Olympiacos. Además, el equipo moscovita no está atravesando su mejor momento en la Euroliga tras tres derrotas seguidas, pese a la vuelta ya de Alexei Shved.

El escolta ruso, garantía de puntos y asistencias, se perdió una buena parte de la temporada y su equipo lo notó, aunque no en la primera vuelta en el WiZink Center, donde cayó por 79-74. Entonces lo dirigía Georgios Bartzokas, que ha sido sustituido por un viejo conocido de la afición madridista como Rimas Kurtinaitis. Para reforzarse hasta final de temporada ha llegado el letón Janis Timma y el escolta Andrew Harrison, aunque su presencia no está garantizada.